«Tenemos que aprender a valorarnos y mostrar nuestra valía al mundo»

La octava edición de Talento Mujer, anteriormente denominado Fabricando Talento, se convirtió el pasado jueves en una cita muy especial. La Rotativa, nuevo espacio dedicado a eventos de LAS PROVINCIAS, acogía una poderosa muestra de talento en femenino. Las ocho ponentes que subieron al escenario demostraron que la capacidad de trabajo, la resiliencia, la escucha activa, la actitud o la energía no entienden de género. Las mujeres que accedieron al estrado lo hicieron para contar su experiencia en los diferentes campos en los que trabajan.

Mucho se pudo descubrir en Talento Mujer, organizado por LAS PROVINCIAS en colaboración con la Asociación de Empresarias y Profesionales de Valencia (EVAP) y BPW-Valencia y con el patrocinio de ESIC Business & Marketing School e Ibercaja, gracias a estas experiencias vividas en la rama de la sanidad, la empresa, la formación, la seguridad y la solidaridad. Y, sobre todo, gracias a la impronta que estas mujeres inspiradoras dejaron a su paso por el escenario en los cuatro bloques que los que se dividió el foro moderado por la periodista Maribel Vilaplana.

Al comienzo del acto tomaron la palabra tanto Eva Blasco, presidenta de EVAP, como José Gil, director provincial de IBERCAJA, para señalar la importancia de este tipo de eventos y para destacar que en las anteriores ediciones se fabricaba talento, pero que en esta el objetivo era mostrar el talento femenino existente que supone toda una inspiración para cambiar el mundo. «Creemos que es muy importante que pasemos de modo off a modo on. Debemos ir recuperando la presencialidad y la cotideanidad con todas las garantías, ya que la recuperación va a depender de ello», señalaba Eva Blasco.

De la importancia del papel de la mujer en la empresa y de la perspectiva que su visión femenina aporta habló José Gil y señaló que en su empresa «tiene un 39% de mujeres al frente de cargos directivos cuando la media está en el 30%. En muchas ocasiones las mujeres destacan en cualidades como la empatía, orientación, capacidad o adaptación al cambio y esto en los puestos de decisión se necesita más que nunca».

En la primera mesa redonda del foro estuvieron presentes Pilar Argente, jefa del Área de Anestesia y Reanimación; Ana Regueira, directora Enfermera del Hospital La Fe; y la doctora Pilar Botija, subdirectora Médica del Departamento de Salud del Clínico. A lo largo de su intervención contaron su experiencia a lo largo de estos meses de pandemia, lo que habían aprendido en el desarrollo de sus labores y agradecieron a sus compañeros sanitarios el esfuerzo realizado. Del mismo modo, señalaron que «no somos héroes, sino personas de carne y hueso».

Pilar Argente señaló que «en estos momentos conocemos mucho más del virus, pero también desconocemos otros aspectos. Nos pusimos la meta de sacar adelante la escalada y lo logramos gracias al esfuerzo de todos. Desde el personal de limpieza pasando por celadores, enfermeros, médicos, etc. Lo complicado viene con la desescalada porque hay que retomar la actividad normal, las consultas, los tratamientos, etc. Estamos en una calma tensa, la pandemia ha estresado el sistema y ha puesto en valor lo mejor y lo peor de nosotros mismos y del sistema».

A la dificultad de enfrentarse a lo desconocido se unió, según explicó Ana Regueira, la formación del personal, ya que fue una «ardua tarea». «La conselleria de Sanidad nos dotó de personal, pero lo cierto es que venia muy asustado porque no sabíamos a lo que nos enfrentábamos. Tuvimos que aprender a prevenir los riesgos, cómo actuar y, sobre todo, a perder el miedo y trabajar con precaución... Sabemos que la mejor ayuda es que la gente se proteja, ya que así nos protegen a nosotros». A esto Argente añadió que «lo hemos pasado mal, hemos perdido pacientes, compañeros. Cuando estás en la batalla generas endorfinas y sientes que puedes con todo, pero cuando acaba pasa factura».

De la forma de intentar parar el virus y de la ansiedad que genera esta pandemia habló Pilar Botija. «Hemos tenido que gestionar la ansiedad propia y la ajena. Hemos estudiando mañana, tarde y noche, hemos hecho autoformación para poder tomar las mejores decisiones. Las crisis son un reto y una oportunidad. A pesar de todo este estrés he visto a la gente trabajar con pasión, de forma colaborativa y creo que es una oportunidad para transformarnos».

Las tres ponentes señalaron que de estos meses se quedan con el trabajo en equipo, con la capacidad y el talento que hay en la sanidad tanto pública como privada.

En el bloque de 'La empresa reinventada' fueron Cristina Monge, secretaria General de AVEP-Sp Berner; María Guijarro, subdirectora corporativa de Investigación en ESIC; y Mónica García, gerente de Expansión SP Berner, las que contaron sus vivencias a lo largo de estos meses y cómo habían trabajado para sacar adelante los retos a lo que la pandemia les ha enfrentado.

«Estamos en un momento en el que la industria ha tomado el relevo. Somos un país de turismo y servicios y estos sectores están sufriendo mucho. Ahora nosotros llevamos el estandarte de la recuperación», señalaba Cristina Monge, a lo que Mónica García añadía que «hemos demostrado el compromiso de la gente de la industria. Las máquinas no han parado y se han reinventado. Tenemos que reconocer la labor de todos aquellos operarios que lo han hecho posible». En referencia al mundo de la formación, María Guijarro explicaba que «todo se ha acelerado y ante la incertidumbre hemos aprendido mucho».

Respecto a si por ser mujeres se habían sentido discriminadas a lo largo de su trayectoria profesional las tres señalaron que mayoritariamente no, pero que, en el fondo, todo era una cuestión de actitud. «Un cambio de actitud te puede cambiar el día. Hay mucho talento femenino, y también masculino, pero tenemos que tener más autoestima, más seguridad. He detectado que los hombre tienen la capacidad de, aún valiendo la mitad, parecer el doble. Debemos aprender a valorarnos y ha mostrarlo», señalaba García.

«Tenemos que poner en valor las actitudes que históricamente hemos desempeñado», apuntaba Monge, quien añadía que «la flexibilidad que se exige a partir de ahora nos pone en una posición mas ventajosa». En cuanto al futuro, María Guijarro apunaba q que «debemos crecer en el comercio interior, creernos la calidad de la producción que tenemos, la formación y apoyar a nuestras empresas tanto desde las instituciones como desde los consumidores».

Como las trayectorias de las anteriores ponentes, las vidas de Marisol Conde, jefe de la Policía Autonómica de la GVA, y Sandra Ibarra, presidenta de la Fundación Sandra Ibarra, han sido y son inspiradoras. «Es gratificante ver como cada vez más mujeres opositan a los cuerpos de fuerzas y seguridad del estado. En cierta medida ves que tu esfuerzo ha validado la pena. He vivido muchos años complicados cuando estaba en la lucha antiterrorista, tanto en lo personal como en lo laboral, pero eso me ha creado un poso de solidez, me ha curtido». señalaba Conde quien explicó que no se siente especial por ser la primera mujer que llega a ser jefe de la Policía Autonómica. «No me paro a pensar ni en la edad que tengo, ni en el género. Solo pienso que he llegado aquí por el trabajo bien hecho. Animo a todas las policías que están iniciando su labor a que cumplan con su trabajo con dedicación, esfuerzo. Esto lo valoro en la misma medida, se lo tienen que creer, tener confianza en las habilidad y cualidades de una misma para llegar a la meta». Los objetivos de Conde actualmente son conocer perfectamente el funcionamiento de la Autonómica y crear en todas las provincias la Oficina de atención a las víctimas de violencia de género por un equipo disciplinar.

Por su parte, Sandra Ibarra cerró el acto con la idea de 'Ilusionar cuando todo es gris'. Ibarra contó su experiencia con el cáncer, el cual frenó su vida en el momento en el que comenzaba a cumplir sus objetivos. Sin embargo, logró recuperarse y encontrar el camino, a través de su fundación, para llevar esperanza a los demás. «La vida es una cuestión de actitud, es lo único que podemos elegir. Todos tenemos miedos pero los supervivientes de cáncer hemos descubierto que somos muy fuertes y que el ser humano tiene capacidad de salir adelante», explicaba Ibarra y concluía diciendo que «la vida me ha regalado la oportunidad de crear una escuela de vida y unas unidades de supervivientes de cáncer y un cambio en el sistema sanitario. Esto es como mi legado». Al acto acudieron con todas las medidas de seguridad marcadas por las autoridades medio centenar de personas, entre ellas Gonzalo Zarranz, presidente de LAS PROVINCIAS, y la cita pudo seguirse vía streaming.