«Los centros escolares deben ser generadores de oportunidades»

En un momento en el que se están abriendo los plazos para la solicitud de matriculaciones del próximo curso 2020-2021, la mesa de expertos de LAS PROVINCIAS ha querido juntar a representantes del sector privado de la educación valenciana con el fin de debatir sobre el estado de un sector clave para el futuro de los niños.

Sobre ello hablaron Alejandro Monzonís, director general de Iale Internacional School; Rubén Benet, director de admisión de Colegio Internacional de Levante; Ana Benavent, directora de Secundaria y Bachillerato de Mas Camarena; Louise Grint, coordinadora IB de Mas Camarena; Mª José Sánchez, directora de Julio Verne School; Silvia Clariana, directora de La Devesa School de Carlet; Franc Corbí, director general de Grupo British School Alzira, Xativa y Gandía; Michael L. Smith, director de American School of Valencia; y Susana Albiñana, directora técnica del Colegio Alemán.

Durante el debate se pusieron sobre la mesa temas como lo encorsetado que está el sistema educativo español y el hecho de que cada comunidad autónoma tenga competencias sobre ello, el hecho de que los escolares que acuden a la privada pagan doblemente por su educación y que debería, de alguna forma compensar ese hecho, el sistemático olvido que sufre la privada por parte de la administración en cuanto a becas y ayudas, así como el hecho de que los ratios de fracaso escolar son menores debido a la educación personalizada que caracteriza a este tipo de centros escolares.

Los ponentes estuvieron de acuerdo en señalar que «cuando las familias matriculan a sus hijos en un colegio a los tres años no piensan en ese futuro laboral ya que lo ven muy lejos». Sin embargo, se fijan en aspectos como el proyecto educativo, el aprendizaje del idioma, la cercanía de casa, el uso de las nuevas tecnologías en la metodología del aula. También en el hecho de que ofrezcan una formación integral en la que aprendan los valores y las habilidades que el futuro tanto laboral como personal les va a exigir cuando sean adultos. Además, los padres están preocupados por la felicidad de sus hijos, señalaban en la mesa, «por lo que buscan un centro que el aprendizaje también esté enfocado en lograr que los niños sean personas seguras, con una gran autoestima y que se sientan identificados con el centro, con el proyecto educativo».

Los padres también valoran el hecho de disponer de actividades extraescolares que les permita una mayor conciliación y que el proyecto educativo sea innovador y permita desarrollar a los alumnos sus inquietudes.

Según explicaron los ponentes en la mesa de expertos sobre educación, «los centros deben ser generadores de oportunidades en la que disfruten del presente mirando al futuro. Los padres esperan que seamos capaces de acompañar a sus hijos y a ellos mismos durante los 16-18 años que dura la educación. Es por ello que los niños se deben sentir identificados con el centro educativo y debemos acompañarlos a lo largo del proceso de crecimiento donde tendrán éxitos y fracasos».

Respecto al estado del sector de la educación privada, Susana Albiñana, explicaba que el caso del Colegio Alemán es un poco especial ya que son «un colegio privado pero al ser financiado por Alemania funcionamos como uno público. Considero que esta fórmula es algo que le falta al sistema privado ya que así damos la posibilidad de que entren alumnos de familias desfavorecidas económicamente y lo hagan de forma democráticamente».

Por su parte, Mª José Sánchez explicaba que «el sector debería tener más autonomía a la hora de poder trabajar por proyectos, el curriculum está encorsetado dentro de demasiadas áreas y temas de áreas. Consideramos que por proyectos se podría aprender más. Además, consideramos que necesitamos una mayor estabilidad legislativa y que no cambien las cosas cuando hay un cambio de gobierno, sea del color que sea».

A este respecto, Franc Corbí señalaba que «esa es una de las luchas del sistema. La autonomía curricular, que no estén tan normalizados, poder ofrecer proyectos diferenciadores, tener esa cercaría a las familias, al proyecto que les interese y no pretender la linealidad que ahora existe». Del mismo modo añadía que «otra es la que se debería de potenciarse un sistema legal de verdadera elección de centro por parte de las familias. Desde ayudas por vía desgravación fiscal por la inversión que las familias realizan en la educación de sus hijos y también otros modelos de ayudas como por ejemplo que cada familia recibiera el dinero y que cada uno lo utilizara en el centro que mejor le cuadrase». Concluyó la idea señalando que «existe ahora mismo un problema de natalidad y no hay apoyo a las familias para los gastos que supone la educación».

A todo esto Alejandro Monzonís apuntaba que «es un sistema antiguo y no está adaptado. Si solo diéramos lo que marca el programa nuestra oferta educativa estaría empobrecida como la de la pública. Nosotros desde la privada nos adaptamos a la sociedad pide y estiramos mucho para ello, topamos administración muy burocrática que se ciñe a lo que marca la normativa. Por ello, nuestros horarios se ven sobrecargados, si pudieran elegir nos especializaríamos».

A todo ello se une que el sistema laboral está en constante cambio y ahora nadie espera comenzar a trabajar y jubilarse en la misma empresa. «No hay contenido ni habilidad que se pueda predecir. La clave de la enseñanza es enseñarles a prender. Somos conscientes de que toda la vida vamos a estar aprendiendo. Porque si queremos estar en a la última hay que hacerlo», explicaba Michael L. Smith.

«Este aprendizaje determinará si son buenos o no para el trabajo. Desde los centros privados hemos encontrado la forma de fomentar ese talento y enriquecimiento para poder llegar a esas competencias que no están dentro del currículo. Ejemplo de ello son los clubes de debate, la oratoria, aprende a hacer apps, robótica, etc.» apunta Corbí.

Respecto a la oferta educativa de los centros, el director general de Iale Internacional School explicó que tienen tres pilares como son el dominio inglés y distintos idiomas; procurar que cada alumno saque todo su potencial; así como que sean felices y crean en ellos mismos. Importante también es la capacidad de critica y juicio y saber cuales son las metas. Por ello, adaptamos la ruta estudio».

Por su parte, el director de admisión de Colegio Internacional de Levante explicó que uno de sus pilares fundamentales es «la personalización del aprendizaje». Por ello, cada alumno cuenta con su tutor personal, que es elegido por ellos a partir de secundaria. El tutor es el encargado de hablar con las familias, los alumnos y el resto del claustro para ayudar a cada alumno tanto en lo académico como en lo personal. Además, es destacable la innovación metodológica, y muestra de ello es que fue uno de los tres colegios elegidos por Apple para implementar su programa Everyone Can Code. En el Colegio, la tecnología está siempre al servicio de la metodología para lograr que las experiencias de aprendizaje sean auténticas y personales. Además, el Colegio cuenta con un alumnado muy diverso, con 40 nacionalidades diferentes. Alrededor del 20% del alumnado procede otros países.

Desde Mas Camarena se apuesta por la tecnología «también somos uno de los centros escogidos para utilizar la filosofía de Apple y sus herramientas. Además de la parte tecnológica, resaltamos la atención individualizada, el gabinete de psicólogos, conocer primera mano a los alumnos y familias atender las necesidades y adelantarnos a ellas. Estamos en pleno proceso de internacionalización con la inauguración residencia internacional», explicaba directora de Secundaria y Bachillerato del centro.

A ello la coordinadora del IB de Mas Camarena añadía que «la filosofía, las habilidades, el pensamiento crítico y el trabajo colaborativo van de la mano».

La directora de Julio Verne School explicó que su principal diferencia es que son «una cooperativa por lo que se les enseña los valores y el ADN cooperativista. Disponemos de una metodología y modelo pedagógico propio impartir en las aulas. La innovación, tema idiomas y tecnológico y sobre todo formar buenas personas son algunos de nuestros puntos fuertes».

Del mismo grupo es La Devesa School de Carlet cuya directora explicaba que «lo que más destacan las familias es la cercanía, los alumnos son únicos, nuestra propuesta de valor es la certificación en idiomas así como la creatividad, la educación emocional y en valores. Es importante gestionar las emociones desde infantil».

El director general de Grupo British School Alzira, Xativa y Gandía explicaba que su valor diferencial es que «somos colegio británico, curriculum diferenciado al español. Tenemos una especialización máxima, con una adaptación curricular del alumno tanto de talento como carencia. En nuestros centros se aprende de forma experiencial, se investiga, piensa, se palpa… se potencia las características que cualquier persona va a necesitar en su puesto de trabajo»

El director de American School of Valencia explicó que «en bachillerato tres posibilidades: el americano puro, el híbrido homologado por el español y el internacional. Somos un colegio internacional con 44 nacionalidades y 26 idiomas diferentes». Por su parte, la directora técnica del Colegio Alemán explicó que su hecho diferencial es que se sigue el curriculum alemán así como la forma de gestionar el colegio. La atención a la diversidad y el aprendizaje del alemán así como ser el único centro en le que se puede entrar en quinto de primaria».