«La sostenibilidad generará industria y empresas, es el futuro»

La viabilidad del planeta pasa por ser respetuosos con el medio ambiente y realizar un consumo racional de los recursos de la Tierra. Para tomar medidas al respecto, en 2015 las Naciones Unidas organizó la Cumbre de Desarrollo Sostenible. En ella se elaboró la Agenda 2030 que contiene los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). La pandemia del Covid-19 no viene sino a demostrar que la sostenibilidad es la meta a alcanzar si se quiere mantener vivo el planeta. Este 2020 ha supuesto un punto de inflexión para acabar de alcanzar esa conciencia social, económica y ambiental que se venía gestando desde hace años.

En la Comunitat Valenciana existen infinidad de ejemplos de compañías que llevan la sostenibilidad en su ADN y que con sus acciones están contribuyendo no solo al cuidado del medio ambiente y el bienestar social, sino a aumentar su rentabilidad. LAS PROVINCIAS y Club Cámara Valencia reunieron en la mesa de expertos a diversas empresas pioneras en la transformación hacía la sostenibilidad. En ella estuvieron presentes: José Vicente Morata, presidente de Cámara Valencia; Julia Company, directora General del IVACE; David Gómez, director Red Empresas Territorial Este Banco Sabadell; Ibán Molina, delegado Institucional en la Comunitat Valenciana Iberdrola; Carlos García Bartual, director de Marketing & Communications de Vicente Gandía Plá; Vicente Arnau, delegado Castellón y Valencia de Clece; José Roselló, CEO de Don Hierro; y Andrés Gurrea, socio-director Grant Thornton.

«Actualmente las empresas deben incorporar en su ADN la sostenibilidad, del mismo modo que hace treinta años se empezaron a preocupar por el cumplimiento de la Ley de Protección Laboral, luego cumplieron con la responsabilidad social corporativa. Ahora contamos con la Agenda 2030 como guía y cumplirla será lo normal en un futuro no muy lejano, ya que la empresa que no lo cumpla no va a existir», señaló José Vicente Morata en su intervención y aseguró que «Cámara Valencia se ha propuesto informar, formar y ayudar en temas de sostenibilidad. Por ello, se ha puesto en marcha el portal de Sostenibilidad, que se suma a las ayudas de hasta 7.000 euros para cumplir con los objetivos». El presidente de Cámara Valencia comentó que el objetivo es ser ejemplo y transmitir las tendencias de cambio sociales.

En términos de rentabilidad empresarial comenzó a hablar Julia Company, ya que desde la Conselleria entienden que las empresas deben ser sostenibles o, al final, dejarán de existir. «Entendemos que ser sostenible es rentable para la compañía pues permite corregir las ineficiencias y es un factor de innovación y de aceleración. Del mismo modo demuestra un compromiso con la sociedad y, por último, puede ser un factor de mejora para la entidad», apuntó la directora General del IVACE y comentó que es el consumidor el que está incentivando estos cambios empresariales con su comportamiento.

En la mesa estuvieron de acuerdo que las grandes empresas son las que más asumido tienen este concepto, pero que entre todos se debe lograr que llegue a la pyme que es quien conforma el grueso de la economía valenciana y nacional. «Para ayudar a las empresas, desde el IVACE nos hemos focalizado, principalmente, en la economía circular, implantada desde el ecodiseño. También en las ayudas a los institutos tecnológicos, que muestran como implementar la sostenibilidad en la empresa, así como se ha implantado un observatorio de simbiosis industrial para intercambiar experiencias». Company también señaló que se había presentado un proyecto de 'Green Deal' europeo basado en la economía circular y que otra de las patas que trabajan es la eficiencia energética con ayudas al autoconsumo o la movilidad.

En esta línea se pronunció Andrés Gurrea al señalar que «la sostenibilidad no es una opción, es necesaria. Sin embargo, no hay que lanzarse a ello para captar las diferentes subvenciones. Las ayudas no deben ser la meta. Se debe incorporar a la compañía y estar alineado con la misión, visión y valores de la misma». Ese fue uno de los temas que se trató en la mesa de expertos al hablar de los fondos europeos. «Son 140.000 millones a invertir en un corto espacio de tiempo. Es una oportunidad y un reto a la vez. Desde la Generalitat se está impulsando proyectos valencianos. Sabemos que no es fácil y que necesitamos la colaboración de las empresas», señaló Company quien aseguró que buscan que también lleguen a las pequeñas empresas al generar colaboraciones con las grandes empresas tractoras, ya que la pandemia ha acelerado la digitalización y la sostenibilidad.

Al hilo de esto, Ibán Molina explicó que «es una oportunidad histórica para todos. En la Comunitat tenemos más energías renovables que el resto de países de Europa gracias al sol y el viento. En la Comunitat un panel fotovoltaico es un 30% más eficiente que en Alemania. Esto debemos aprovecharlo no solo para implantarlo, sino para generar industria valenciana y desarrollar empresas».

Sobre el concepto que está cogiendo fuerza en Europa, Bauhaus, habló José Roselló. Este es el nombre de una escuela de arquitectura y diseño fundada por Walter Gropius en Alemania en 1919 y que contaba con un programa de formación integral humana-social. «Se van a generar cinco subsedes en Europa y desde diferentes colectivos estamos reivindicando que una de ellas venga a Valencia, ya que el mundo empresarial valenciano es sensible y está en el día a día de los negocios. Esto puede atraer inversión y convertir a Valencia en motor de innovación y sostenibilidad», apuntó Roselló. Al hilo de este movimiento habló el CEO de Idai Nature al señalar que «desde nuestra empresa se está empezando a trabajar en la agricultura biodinámica. Hace doce años cuando hablaba de la agricultura ecológica casi me tomaban por loco, ahora esa etapa ya se ha superado y se apuesta por el cultivo en función del cosmos» y añadió que a su entender «lo que falta es el espíritu de colaboración entre las empresas y que esto puede ser un lastre a la hora de optar a las ayudas europeas». A lo largo del debate también se mencionó la importancia de que las empresas comuniquen las iniciativas que están llevando a cabo. «Las empresas deben comunicar sus avances en sostenibilidad y hacer partícipes a sus empleados de esta filosofía, ya que ahora mismo ya no se mueven por el salario. Son los trabajadores los que eligen a las empresas y, o somos capaces de retener el talento, o se tiene rotación en la plantilla que no permite llevar proyectos sostenidos en el tiempo», apuntaba Vicente Arnau. En esta línea se expresó Carlos García al señalar que «no solo hay que mostrar las certificaciones ISO que cada uno tenemos, sino que hay que concienciar a todos los trabajadores y mantenerlos informados. Desde Vicente Gandía hemos desarrollado una app para desarrollar un ejercicio de transparencia con ellos. Saben lo que se hace y cómo se hace. Además, pueden realizar sugerencias de forma anónima».

Además de las ayudas, en la mesa también se habló de la financiación de las empresas. David Gómez, el director de la Red Empresas Territorial Este del Banco Sabadell explicó que «actualmente no solo se mira si una empresa es rentable o no a la hora de financiarla.

La sostenibilidad es un carácter estratégico que se debe implantar desde la cúpula directiva de la empresa. A la hora de conceder financiación en estos momentos ya se analizan factores que no son puramente económicos como la huella de carbono, la transición ecológica, la colaboración con la sociedad, la igualdad, etcétera. Son factores para calificar la empresa, más allá de los números».

Tras el debate, los ponentes llegaron a la conclusión de que la pandemia ha acelerado y ha demostrado que vivimos en un mundo globalizado en el que las acciones de todos trascienden. Además, los fondos europeos suponen una gran oportunidad para lograr que la economía valenciana abandere la sostenibilidad y logre aumentar el tejido empresarial e industrial de la Comunitat. Apoyando la retención del talento en un contexto en el que la digitalización va a marcar el futuro de las relaciones tanto sociales como económicas.