«El tejido empresarial valenciano está preparado para aprovechar este impulso»

En los próximos ocho años se van a inyectar a las economías de los estados miembro 1,8 billones de euros. De ellos, sale un paquete extra de 750 millones de euros destinados a la recuperación económica con el objetivo de superar la crisis provocada por el Covid-19. Son los Fondos Next Generation EU. Este próximo mes de abril la Comisión Europea (CE) aprobará los diferentes planes presentados por los países miembros para la utilización de estos paquetes de ayudas.

Esta inyección económica contará con un control por parte de la CE para lograr así el objetivo de financiar una transformación y modernización de las economías europeas. Estas ayudas siguen la línea prevista en el Pacto Verde Europeo, por lo que la transformación será en clave 'verde y digital'. De hecho, el 37% de los fondos deberán ir la transición verde y el 20% a la digitalización.

Para hablar sobre el beneficio que supondrán los Fondos Next Generation para el tejido empresarial valenciano, LAS PROVINCIAS y CaixaBank reunieron a diversos expertos en el foro digital 'Fondos Next Generation EU: Claves para las empresas de la Comunitat Valenciana'. El pasado jueves intervinieron Felipe Pulido, director comercial de empresas de CaixaBank en la Comunitat Valenciana; Juan Ángel Poyatos, director comercial de coordinación de la acción del Gobierno GVA y fondos Next Generation; Inmaculada García, directora Gerente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana; Jorge Linares, director Gerente de Cámara Valencia; y David Martín, socio responsable de Estrategia Reguladora en Monitor Deloitte.

Desde hace meses la administración está en contacto permanente con el sector productivo con el fin de conocer las 'manifestaciones de interés' que las empresas tienen por participar en los diferentes proyectos del programa que España implantará tras su aprobación en abril por parte de la CE. Todos los ponentes estuvieron de acuerdo al señalar que España está preparada para gestionar correctamente esta inyección económica. «Nuestro país ya lo ha demostrado con otras ayudas que ha recibido. Somos un país dinámico. Pero no solo por eso, las empresas han demostrado en anteriores crisis que la internacionalización es un buen camino y que saben realizar los ajustes necesarios», señaló Felipe Pulido a lo que Inmaculada García añadió que «no solo preparados, sino que estamos deseosos de revivirlos para dar un impulso a la economía. Todos los actores económicos llevamos meses trabajando juntos para aprovecharlo».

Estos fondos suponen un reto mayúsculo, pero «España ya ha demostrado que puede ser referente en cuanto a la forma de articular los diferentes mecanismos para gestionar las ayudas. Contamos con una excelente vertebración administrativa, una administración de calidad, que permitirá que llegue de la mejor forma posible a las empresas», apuntó David Martín.

Actualmente, muchas empresas han 'manifestado su interés' por participar. Sin embargo, esto no significa que finalmente vayan a optar a ello o que aquellas que no han demostrado todavía su interés por los proyectos no puedan adherirse, explicó Poyatos, ya que el plan se cerrará en estas semanas y será el 30 de abril cuando la Comisión Europea se pronuncie al respecto.

Sin embargo, ni las empresas ni el estado por separado van a poder desarrollar todo su potencial. Es por ello que desde la Comisión Europea se pide la «colaboración público-privada. Se debe trabajar como una unidad para afrontarlo. Deben estar preparados tanto los organismos como las empresas, pymes y autónomos. El tejido empresarial valenciano está preparado para aprovechar este impulso. Todos los agentes económicos tienen cabida y va a ser muy beneficioso para el futuro. Somos conscientes de ello por experiencias anteriores, por la capacidad y el talento que hay en España», expresó Pulido.

Respecto a la falta de información inicial, Juan Ángel Poyatos explicó que «todavía se sigue negociando y por ello no hay información de cómo serán los procedimientos y cuándo. Sin embargo, al estar ya en contacto las instituciones con las empresas se ha buscado adelantar los plazos y ajustar al máximo las necesidades. Al final el dinero va a empezar a llegar en unos meses». Al hilo de esto, el miembro de Deloitte European Center for Recovery & Resilence comentó que «se debe ser paciente, ya que se está trabajando duro para paliar los impactos iniciales de la crisis. Es normal esta falta de información ahora mismo al estar trabajándose en las líneas maestras del programa».

Desde Cámara Valencia, explicó Jorge Linares, se ha ido informando a las pymes. De hecho «desde Cámara de Comercio de España se puso en marcha un portal exclusivo para dar información sobre los Fondos Next Generation y a nivel autonómico tenemos asesoramiento exclusivo para las ayudas y subvenciones».

Al igual que será necesaria la colaboración público-privada para el desarrollo de todos los planes, los ponentes estuvieron de acuerdo en señalar que los consorcios empresariales serán imprescindibles para salir de la actual situación y poder aprovechar toda la fuerza de esta inyección de capital. De hecho, según señalaron, no solo serán las grandes empresas las beneficiadas de esto, sino que la pequeña y mediana empresa, así como los autónomos tienen mucho que ganar con ellos.

«En la Comunitat se han presentado 20 proyectos estratégicos de todo tipo y de diferentes sectores. En ellos están tanto grandes empresas como autónomos. Está claro que las grandes empresas tractoras serán las que tirarán de las pymes, pero todos se van a beneficiar», argumentaba Inmaculada García a lo que Linares añadía que «las pymes se van a beneficiar de esos grandes proyectos que van a presentar los organismos y esas empresas tractoras, con ellos se representan las necesidades reales de la pequeña y mediana empresa como es la digitalización, la sostenibilidad, etcétera».

En esa línea se expresaba el director comercial de empresas de CaixaBank en la Comunitat Valenciana al señalar que «todos tienen cabida y eso es una gran suerte para la Comunitat. No vivimos de un solo producto, sino de muchos porque tenemos clusters de actividad muy concretos. Esto es una ventaja competitiva. Las grandes empresas se van a beneficiar de las ayudas, pero a través de ellas lo harán todas las empresas auxiliares».

A lo largo de la tarde también se hizo referencia al papel que juega el sector bancario. «Estoy convencido de que la banca adelantará las ayudas. Tenemos experiencia en este tipo de gestiones. Llevamos años haciéndolo, como por ejemplo con los créditos ICO o las ayudas de la PAC. Además, la banca española está implantada en todo el territorio y está cerca de las pymes y autónomos. A esto hay que añadir que el sector bancario cuenta con los instrumentos financieros y con equipos de análisis para valorar y controlar los proyectos y su viabilidad. Tenemos la experiencia y los recursos para participar en la canalización de los fondos».

Los fondos Next Generation tienen el foco puesto en la sostenibilidad y la digitalización del tejido productivo. Europa busca la eficiencia de los recursos y es una gran oportunidad para diferenciarse en un mercado global. Además, según señalaron los ponentes, se está buscando una reindustrialización de los estados miembro, ya que durante la pandemia se ha demostrado que Europa no se puede permitir depender de terceros para obtener ciertos productos. Respecto a la digitalización apuntaron que las empresas han acelerado sus procesos, pero sectores como la sanidad y la educación o la propia administración se han dado cuenta de la importancia de implantarla.

De las transformaciones que la pandemia ha traído también hablaron. «Es un punto de inflexión y algunas empresas han cambiado su modelo productivo», apuntó Pulido, a lo que Poyatos añadió que «se ha demostrado una gran capacidad de innovación por parte de las empresas». Marín apuntó como punto fuerte la red de institutos tecnológicos existente en la Comunitat «como una gran ayuda que las empresas deben exprimir al máximo, así como los centros de investigación de las universidades». Por su parte, Linares señaló es una «gran oportunidad para reconvertir el modelo productivo del país», a lo que Martín añadió que «también es un salto muy positivo para la Unión Europea que de esta forma contesta y se enfrenta al actual desafío existente entre los bloques norteamericano y chino».