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REDACCIÓN
Albal
Lunes, 26 de octubre 2020, 00:04
Promover acciones para fomentar el empleo en el ámbito local es una máxima del gobierno que preside Ramón Marí. Por este motivo, hace años que el ejecutivo impulsa el Plan 'Albal Incluye', destinado a la contratación de personas desempleadas, pertenecientes a colectivos desfavorecidos, de difícil inserción o en riesgo de exclusión social, debido a la falta de trabajo.
La crisis económica del Covid-19 ha obligado a aumentar en 100.000 euros la partida destinada a crear empleo. Inicialmente, el presupuesto general contemplaba 210.000 euros, y para su incremento ha hecho falta realizar una modificación de crédito con lo que el total asciende a los 310.000 euros.
Desde que se iniciara el año, 41 nuevas personas han trabajado en diferentes áreas del consistorio. Los primeros en firmar su vinculación laboral fueron los diez peones y oficiales que han realizado tareas múltiples durante tres meses en la brigada de Obras. Su trabajo concluyó en abril y ha sido fundamental durante el estado de alarma porque han sido personal esencial del Ayuntamiento durante los peores meses de la pandemia.
El relevo lo tomaron otros 10 trabajadores que el pasado 13 de julio firmaron hasta octubre. Este jueves 22, otra decena de personas han formalizado su contrato con el consistorio, donde les dio la bienvenida el alcalde. Realizarán tareas de mantenimiento, limpieza y desinfección de las vías urbanas y edificios municipales, la reparación y mantenimiento de espacios públicos y de su centro de trabajo.
El pasado 30 de junio, otros seis vecinos se incorporaban al consistorio como peones agrarios para la limpieza y tratamiento de los barrancos locales, concretamente el de la Cabrera, el de Picassent y el de la Font. Se trata del proyecto ECO-Albal 2020 para planes especiales de empleo en zonas rurales deprimidas, impulsado por la concejalía de Agricultura que dirige María José Hernández Vila, en colaboración con el Sepe, que aporta 19.464 euros a la iniciativa y los restantes 2.109 son de fondos propios.
Por otra parte, desde el 13 de julio otras cinco personas trabajan en la residencia municipal Julio Muñoz Genovés como auxiliares donde realizan tareas de cuidado, aseo y atención a los residentes. Se incorporaron gracias a la bolsa existente en este espacio municipal que, cabe recordar, ha salido ileso de la pandemia y mantiene a cero el número de contagiados.
También se despidió este octubre a los siete jóvenes que han trabajado en diferentes áreas municipales gracias a los programas Emcuju y Empuju de la Generalitat. Para su contratación, el consistorio recibió una subvención de 171.978 euros que ha permitido dar empleo.
Las áreas de la AMIC, Casal Jove, Recursos Humanos, Servicios Sociales, brigada de Obras, Cultura y la residencia municipal se han nutrido de estos empleados que en su último día, valoraron de manera muy positiva la experiencia.
El primer edil insiste a todo el personal laboral del Ayuntamiento que «es necesario extremar las precauciones en sus vidas personales para evitar el contagio entre los trabajadores y trabajadoras».
Como medida de contención del virus, dados los brotes que han aumentado en la Comunitat Valenciana y que también se han notado en Albal, el consistorio ha optado por volver a implantar el teletrabajo, que se realiza por turnos de 15 días entre su personal no esencial. De este modo, se garantiza que más de la mitad de los empleados pueda desarrollar su actividad laboral de forma presencial. También se mantiene la cita previa como medida imprescindible para acceder a las dependencias municipales.
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