El pleno desbloquea el desarrollo de una zona de la playa tras casi 20 años de parálisis

El pleno aprobaba este pasado jueves la cesión de los terrenos a un nuevo agente urbanizador, Valora VLC SL, tras dos décadas de espera, sin soluciones, para poder actuar en esta parcela ubicada en segunda línea de playa, en la avenida Blasco Ibáñez, junto a la antigua zona de ocio. «Estamos muy satisfechos porque por fin damos salida a una pastilla de suelo que llevaba 17 años encallada. Después de mucho trabajo y muchas horas de reuniones con la empresa y los vecinos, este equipo de gobierno ha dado solución a un problema que nos venía heredado y que devolverá a los propietarios el derecho a desarrollar el suelo, tanto año conculcado y que además, mejorará la imagen de esta zona de la playa», afirmó el alcalde, Pere Antoni.

La actuación implicará un cambio en la recalificación del suelo, que pasará de dotacional hotelero a residencial, una modificación que permitirá incrementar la oferta de vivienda en la localidad, tan demandada y más en zona de playa. «Creemos que es un cambio razonable y mucho más sostenible, ya que la anterior propuesta de apartamentos turísticos duplicaba el número de inmuebles, lo que se traduce en más basura y un mayor gasto de agua. Por otro lado, aunque sabemos de la necesidad de crear plaza hotelera, los apartamentos turísticos no eran una solución a esta demanda, ya que suponen segundas residencias encubiertas, con costes elevados y menos servicios», añadía el concejal de Infraestructuras, Antoni Antoni.

El sector cuenta con una superficie de 20.000 metros cuadrados, la mitad de los cuales se destinarán a la edificación, con la construcción de 130 viviendas, y el resto, cerca de 10.000 m2, serán zona verde, donde el equipo de gobierno tiene previsto realizar una amplia zona de esparcimiento y jardines.

La nueva actuación también ha implicado otras modificaciones como la orientación de los inmuebles que pasa a este y oeste, lo que asegura mayor corriente de aire y, por ende, una mejor ventilación y un menor uso de los aparatos de climatización, «lo que derivará en un ahorro energético y una reducción de la huella de CO2, en consonancia con el modelo de Canet sostenible», insistía el alcalde, quien valoraba de forma positiva el nuevo acuerdo. La parcela mantendrá la altura prevista en el primer contrato y también, la volumetría.

Por otro lado, la operación reportará un ingreso de 140.000 euros en las arcas municipales por parte del agente urbanizador. Aportación en concepto de plusvalía.

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