Los premios Cedma reivindican la figura del empresario

El Hotel Dénia Marriott La Sella vivió una velada especial al convertirse en el lugar de reunión de la flor y nata del empresariado de la Marina Alta. Con más de trescientas personas presentes, el Cercle Empresarial de la Marina Alta entregó sus galardones anuales, los Premios Cedma, que en esta edición cumplen tres lustros de vida.

La noche, además de festiva, también fue reivindicativa. Aquellos que subieron al escenario hicieron hincapié en sus discursos en la necesidad de poner en valor la figura del empresario que «tristemente está denostada en estos momentos».

Una de las citas que se repitió en varios momentos de la noche (a las que hizo referencia Benito Mestre, presidente de Cedma, en su intervención) fueron las palabras de la catedrática y directora de la Fundación Étnor para la Ética de los Negocios y las Organizaciones, Adela Cortina: «Las empresas tienen en estos momentos una especial responsabilidad para hacer posible una sociedad más justa, local y global. Son ellas las que pueden generar mayor riqueza, proveernos de productos y servicios en un momento tan complicado como este, crear puestos de trabajo dignamente remunerados, cumplir con ese deber de influencia que solo las grandes empresas tienen para cambiar legislaciones injustas en países en desarrollo y también en los desarrollados».

Mestre también hizo una defensa del sector de la construcción al señalar que «se debe aprender de los errores, pero no imponer un proteccionismo sin estrategia. Hay que actuar y legislar con sentido común para que no se repitan casos como el de Ferrovial, empresa que ha trasladado su sede social a los Países Bajos».

Benito Mestre, quien clausuró la gala de premios, expresó el sentir de los empresarios al señalar que «lo único que solicitamos a los responsables políticos es que nos escuchen. Pido respeto para los empresarios, se necesita que el sector político, social y económico asuma sus responsabilidades y, nosotros como empresas, lo hacemos y, además, jugando con sus reglas».

El presidente de Cedma concluyó señalando que «necesitamos agilidad, pero de verdad. Seguridad jurídica; una reindustrialización; desestacionalizar el turismo; paliar la despoblación de las zonas interiores; poner en valor los campos y la agricultura; un mayor apoyo a la innovación e investigación. Pero, sin duda, lo que necesitamos es que no nos desalienten y que les dejen poner en marcha proyectos para hacerlos viables y rentables».

Si la noche fue especial para todos los empresarios y la sociedad en general de la Marina Alta, más lo fue para los cuatro galardonados. En esta ocasión, los homenajeados fueron Serviden, con el Premio a la Trayectoria Empresarial; Point, a la Innovación; Alberto Morera Arquitectes, a la Sostenibilidad; y Grupo Vapf, al empresario del año.

Para entregar los premios estuvieron como invitados el presidente de Cámara Alicante, Carlos Baño; el presidente de la Confederación Empresarial Valenciana, Salvador Navarro; la directora regional de Banco Sabadell, Isabel Gómez; también estuvo presente el alcalde de la ciudad anfitriona de este acto, Vicent Grimalt. Además, Virginia Ortuño, en representación de LAS PROVINCIAS y Todo Alicante, entregó a los galardonados un regalo especial de parte de ambos medios colaboradores en el evento.

El Grupo Vapf fue distinguido con la empresa o empresario del año. Recogieron el galardón Pedro y Bernat Soliveres expusieron la necesidad de que las empresas tengan una «seguridad jurídica. Entiendo que es necesario pedir seguridad jurídica, ya que este país y esta comarca no pueden avanzar sin ello. La necesitamos para poder trabajar sin interferencias en un entorno seguro y estable. No se puede legislar con miras cortoplacistas. Vivimos en un entorno global y el capital huye cuando ocurre esto».

Por su parte, Alberto Morera, quien recogió el premio de Alberto Morera Arquitectes a la sostenibilidad, apuntó que «la sostenibilidad es un objetivo plural, no individual. Pero ello no es posible sin las infraestructuras adecuadas. Debemos tener movilidad entre y comunicación con las poblaciones vecinas y las comarcas del entorno». Además, Morera señaló la necesidad de «una colaboración público-privada en el campo de la edificación. Necesitamos una rehabilitación y regeneración urbana para un territorio eficiente y cohesionado».

Por su parte, Isabel Agulles, fue la encargada de recoger el premio a la trayectoria empresarial concedido a Serviden y puso en valor en su intervención empresas como la suya atraen a la Marina miles de personas cada año. Por ello, «estamos involucrados activamente él las asociaciones de la comarca. Además, participamos en todo lo que se refiere a la legislación del turismo siempre que se nos requiere. Pero necesitamos por parte de los responsables un compromiso de agilidad en todas las gestiones para poder trabajar honestamente».

El premio a la innovación recayó en Point. José Juan Pons fue el encargado de recoger el premio y señalar que «es importante que los empresarios nos reconozcamos entre nosotros porque esto nos anima a seguir adelante. Como todos sabemos, sin innovación no hay crecimiento y sin crecimiento no hay empresa. Nos hemos reinventado muchas veces y el reto sigue ahí. Ahora las nuevas generaciones deben llegar a la sostenibilidad, a la economía circular y, sin duda, el camino a seguir para lograrlo es la innovación».

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