Hasta 175 artículos pirotécnicos requisados durante la primera noche de Fallas

Uno de los asuntos que más preocupan a las administraciones durante la celebración de las fiestas josefinas es el uso de pirotecnia ilegal. Los últimos años, el antiguo cauce del río Turia se ha convertido en una zona común para el uso de artículos que no cumplen con la normativa. Auténticas bombas caseras que alteran la tranquilidad y seguridad de la ciudad durante la festividad nocturna. Por ello, la Policía realiza las pertinentes labores de vigilancia con el objetivo de evitar episodios de dicha índole. A este respecto, la Policía Local identificó ayer hasta 16 personas por presuntas actividades sospechosas en el cauce del río.

De todas ellas, los agentes levantaron hasta ocho actas relacionadas con el uso o posesión de pirotecnia ilegal. El dispositivo policial que se encarga de salvaguardar la tranquilidad en el río, terminó la noche con hasta 2.538, 3 gramos (más de dos kilogramos y medio) de productos pirotécnicos requisados. Hasta 175 artículos acabaron en posesión de la Policía durante las batidas al antiguo cauce. En este sentido, una noche de aparente tranquilidad, aunque los cuerpos de seguridad no se confían. Las tareas de vigilancia se mantendrán durante todas las noches falleras.

Por desgracia, los últimos años el río se ha convertido en un lugar de punto de encuentro para la detonación de artículos caseros de pirotecnia. Petardos que no cumplen la normativa y atentan contra la seguridad ciudadana. La zona cercana al Palau de la Música ha sido, en las últimas ocasiones, el lugar más frecuentado para aquellos que utilizan estos productos prohibidos. La Policía continúa con su labor de evitar que vuelvan repetirse episodios como el año pasado, para no lamentar de esta manera que el uso de esta pirotecnia provoque incidentes mayores.