¿La borrasca Celia influirá en los premios de las fallas?

Tanto los artistas como los falleros están sufriendo mucho y más después de haber conseguido que las Fallas se pusieran de nuevo en marcha tras la cancelación de la fiesta aquel 10 de marzo de 2020.

Y es que no es para menor, ya que en algunas plazas han aparición grietas e incluso se ha tenido que desmontar de algún remate para hacer reparaciones o para evitar caídas, como en Exposición o Na Jordana y también ha habido fallas como Malvarrosa o L'Antiga que han puesto puntales de madera en algunas piezas para evitar que el viento derribe los ninots.

Ante esta situación, la pregunta que se está haciendo mucha gente es si los posibles desperfectos que queden en las fallas en el momento de pasar el jurado contarán o no, es decir, si harán inclinar la balanza. Ya que en las Fallas de septiembre algunos criticaron la excesiva penalización que sufrieron comisiones como L'Antiga o Sueca, que sí se vieron afectadas por la dana que se registró en ese semana.

El delegado de Falla de la Junta Central Fallera, Salvador García Meri, deja muy claro que «no se da una indicación previa de cómo deben valorar los efectos del agua o el viento. No decimos nada porque no se puede presionar al jurado en ningún sentido. Ellos son los que deliberan». Además, detalla que tampoco hay una indicación sobre cómo valorar estas inclemencias cuando se imparte el curso de jurados.

Dicho esto y lanzada la consulta a varios falleros que han sido jurado de falla de Especial, tanto grande como infantil, hay diversidad de opiniones. Para algunos sí cuenta y ven démerito que se vean desperfectos por el tiempo y otros afirman que lo valoran lo justo, sin darle valor tan negativo.

De los seis falleros que han sido jurado y que ha consultado LAS PROVINCIAS, cuatro sí dan importancia a la habilidad de los artistas para preparar la falla y en su caso, para repararla si hay desperfectos y otros dos afirman darle la importancia justa.

Por ejemplo, Miguel Guillot opina que cuando ha ido de jurado «valoro lo que hay plantado, no lo que ha pasado antes o después. Analizo por qué o de dónde ha venido el desperfecto. Si son desperfectos por las condiciones climatológicas, intento que no me afecte, pero hay algunas veces que se han de tener en cuenta».

Añade que «no lo valoro negativamente, no lo puntúo mal si veo que la falla estaba previamente muy bien pintada y se le ha movido un poco, aunque al final también está el juego o el riesgo de plantar antes o después o si se aplican soluciones como una capa de hidrofugante para evitar daños del agua».

En cambio para otro jurado veterano como Juan Armiñana sí cuenta cómo ha aguantado la falla las inclemencias. «Valoro lo que está plantado». Y explica que «sí se debe de tener en cuenta la cantidad de horas de preparación que hay antes, es decir los trabajos previos que se han hecho para que aguanten las piezas el agua o para que no se filtre por las juntas» y recuerda que «cuando llueve o hace viento es para todos».

Aclara que «no hay que juzgar bocetos, sino lo que está en la plaza. Cuenta el conjunto, siempre intento ver lo bueno, pero si hay algo malo también hay que tenerlo en cuenta». Y afirma que como espectador y como fallero está muy preocupado por el viento y el riesgo que están corriendo los artistas «no son buenos momentos y estamos al lado de los artistas para lo que haga falta».

José Luis Vaello, que fue secretario general de la Junta Central Fallera y ha formado parte dos veces del jurado de falla, opina que «si llueve o hace aire es para todos y hay que valorar lo que se ve». Indica que «hay artistas que a lo mejor han puesto sacabutx más grandes o han aplicado una capa con hidrofugante para preparar la falla y eso es importante».

Comenta que «si hay desperfectos se tiene que restar porque se evalúa lo que se ve en el momento y todos juegan con las mismas condiciones. La capacidad para resolver también cuenta».

Miguel Calap, que fue jurado de Especial de infantil, indica que «cuando vas a la plaza, si el trabajo ha sido bueno o malo, con o sin agua, se nota». Y añade que «sí importa cómo resuelve el artista las situaciones que se produzcan, tiene su valor que separa resolver los desperfectos».

Para Julio Torras también es de los que opina que sí se tiene que valorar. «Si hay malas condiciones de agua y lluvia, afecta a todos y si se estropean es un demérito y siempre gana la que se ve de más calidad y con menor deterioro». Añade que «contar cuenta porque has de ir a valorar todo lo que ves, si está bien o dañada, aunque somos clementes». Y detalla que como espectador y fallero está padeciendo mucho en estos días de plantà «porque trabajar así es difícil y los artistas están arriesgando mucho».

En cambio, Fernando Manjón explica que «sales y juzgas lo que hay en la calle, no lo que deberías ver o no. Es decir, que si retiran un remate porque se ha dañado y no está, juzgo lo que está, no cuenta tanto que esa pieza no esté». Y añade que muchas veces «nos ha pasado que vas a una plaza y por las inclemencias del tiempo están reparando algo y nos hemos ido y vuelves más tarde para volverlo a ver o la misma falla llama a la Junta y nos dicen que pasemos en la última visita».

Manjón también reconoce que los artistas están haciendo un trabajo muy duro, luchando contra el mal tiempo «que ha podido ir debilitando algunas piezas».