Un conductor ebrio y con el carné retirado huye tras estrellarse contra la carpa de la falla Regne de València-Císcar

Un conductor ebrio perdió el control del Opel Astra que conducía y chocó contra la carpa de la falla Regne de València-Císcar en la ciudad de Valencia. El accidente se registró sobre las cinco de la madrugada del sábado y no hubo que lamentar daños personales, ya que no había nadie dentro del recinto a esa hora. El individuo se dio a la fuga al volante del mismo coche, con daños en la parte delantera, y fue detenido poco después por una patrulla de la Policía Nacional.

El Opel Astra golpeó los hierros de sujeción de la carpa y una jaula con mesas y sillas, que quedaron esparcidas por el suelo. El conductor huyó con el vehículo marcha atrás y causó más destrozos. También volcó una nevera tras golpearla y rompió la lona de la carpa.

Como consecuencia del accidente, la matrícula y otras partes del coche se desprendieron. Una patrulla de la Segunda Unidad (retén de Ruzafa) de la Policía Local se desplazó con urgencia al lugar y realizó el atestado del accidente.

El conductor fue identificado y detenido poco después por la Policía Nacional. Según informaron fuentes policiales, una patrulla interceptó el coche cuando circulaba por la calle Arabista Ambrosio Huici. Los agentes no dudaron el parar el vehículo cuando vieron que circulaba con la parte delantera destrozada.

Las mismas fuentes señalaron que el individuo intentó darse a la fuga por segunda vez cuando la Policía Nacional le dio el alto, y dio positivo en la primera prueba de alcoholemia que le realizaron: 0,85 miligramos de alcohol por litro de aire espirado.

Sin embargo, el conductor se negó a realizar la segunda prueba en la central de la Policía Local, por lo que fue detenido por dos delitos: uno por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas y otro por desobediencia tras su negativa a soplar en el etilómetro. Además, el individuo tiene el carné retirado.

El delito de desobediencia, que está recogido en el artículo 383 del Código Penal, se castiga con penas de prisión de hasta un año y con la retirada del permiso de conducir de uno a cuatro años.

Un grupo de falleros había estado decorando la carpa hasta las tres de la madrugada del sábado, por lo que el accidente podría haber sido más grave si hubiera ocurrido sobre esa hora. Los falleros de la comisión recogieron las mesas y sillas que estaban por el suelo, así como los restos del coche accidentado, y repararon los daños para celebrar los actos programados dentro de la carpa.

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