¿Y qué pasa con las fallas?

Sin pausas. Así estaban trabajando ya algunos artistas falleros de la sección Especial para que no les pillara el toro de la plantà, ni las inclemencias del tiempo o las medidas de contención por el contagio del coronavirus, que al final han resultado ser letales. Los aficionados han podido ver estos días trabajos de calidad en todas las demarcaciones de la ciudad.

Ahora, la incógnita es qué pasará con todo ese material. Una parte importante ya está con masilla y trabado en el sitio donde deben arder. La suspensión de las Fallas deja en al aire el trabajo de los talleres, los presupuestos de las comisiones y toda la planificación del año. La opción más lógica sería la destrucción del material, entre otras razones por la imposibilidad de guardarlo en condiciones hasta 2021.

Entre los artistas que primero han movido ficha se encuentra David Sánchez Llongo, que ayer ya tenía muy avanzada la falla de Exposición. La base estaba preparada e incluso comenzaron a subir piezas para seguir con la agenda de plantà prevista por este taller, ya que hoy tenían previsto comenzar también a transportar la falla de La Nova d'Orriols.

En Cuba-Literato Azorín Vicente Martínez Aparici también empezó ayer a alzar el vuelo de los remates y a mostrar los colores de la falla que ha mantenido hasta última hora en misterio, ya que presentaron el boceto en blanco y negro. Reino de Valencia-Duque de Calabria también ha tomado estos días la delantera del montaje, ya que debe plantar fallas vecinas de Ruzafa y en Sueca, Vicente Llácer también tiró de grúa una vez ya pasada la inauguración de las luces.