El 'supersábado' fallero provoca el cierre de calles por carpas, verbenas y plantà

El concejal de Protección Ciudadana, Aarón Cano, estima que las verbenas pasarán del centenar. «Montar una discomóvil es barato y la gente tiene ganas», señala, por lo que considera que el refuerzo de agentes para el servicio nocturno se acercará mucho a los días grandes de la fiesta la próxima semana. El Ayuntamiento ha dispuesto un operativo de 1.800 policías y 600 bomberos para todas las fiestas, además de los servicios ordinarios.

Las calles a las que todo el mundo mirará serán los aledaños de la Lonja, el Mercado Central y los Santos Juanes, donde antes de la pandemia se registraron imágenes dantescas con montañas de basura por el botellón, así como ríos de orina manchando las piedras de la terraza de los Santos Juanes. Los vendedores del mercado tuvieron que aprobar un baldeo extraordinario para abrir después de fiestas.

Este año habrá medio centenar de personas que se dedicarán a limpiar el entorno de las verbenas a partir de las cuatro de la madrugada en toda la ciudad. El recinto interior corresponde a cada comisión fallera, explicó el concejal de Ecología Urbana. Sergi Campillo, al indicar que se dispondrá del presupuesto más alto hasta ahora aprobado por el Ayuntamiento.

El 'supersábado' será la piedra de toque para el dispositivo policial estas Fallas, todavía comprometidas por el riesgo de contagios del Covid-19, aunque el éxito de la jornada «no significará nada», indicó el edil, dado que todavía quedará por atravesar los puentes de los días grandes, más si cabe dado que la cremà será en sábado y los turistas y vecinos tendrán una noche añadida de fiesta.

El dispositivo policial alrededor de la Lonja estará «toda la noche», mientras que la concejalía de Patrimonio y Recursos Culturales colocará una valla desde las siete de la tarde hasta las nueve de la mañana del día siguiente. «La vigilancia policial no parará cuando acabe la verbena», precisó el edil.

En cuanto al resto de la ciudad, el dispositivo junto con la Policía Nacional servirá para reforzar las patrullas en la Gran Vía Marqués del Turia, el barrio de Ruzafa y el jardín del Turia, tradicionales zonas de botellón durante las Fallas. «Hay que dejar a la ciudad esté de fiesta, que la gente se divierta, aunque con límites», dijo sobre la estrategia general para Valencia.

Un aspecto con el que contarán los agentes serán los cortes de calles, dado que este sábado ya estarán levantadas y en uso las 267 carpas falleras autorizadas este año. En el cap i casal hay 392 comisiones, lo que se sumará a lo anterior en cuanto a monumentos falleros y zonas de fuegos y actividades.

Una jornada dura que la noche de este viernes tendrá su preámbulo con las fiestas en carpas y casales. El único requisito por el Covid-19 es el de llevar la mascarilla en interiores, dado que ha decaído el aforo máximo que se pedía a los locales de hostelería hasta hace unas semanas por el coronavirus.

La EMT ya ha aprobado todo el plan de desvíos, que hasta ahora se había visto afectado por la mascletà en la plaza del Ayuntamiento. Las carpas y fallas alteran numerosas líneas, mientras que para el tráfico ocurre lo mismo. A partir del día 16, se cierra el anillo delimitado por las grandes vías, que se extenderá hasta el segundo (Pérez Galdós y Giorgeta) en caso de necesidad.