El Marítimo festeja el acto más festivo y particular de su Semana Santa

En España no hay otro acto igual. La Semana Santa Marinera acoge en su programa de actos uno de los momentos más particulares de los que se viven en las celebraciones semansanteras. Pasodobles, color blanco, rostros descubiertos, flores y alegría. Ese es el ambiente en las calles de los Poblados Marítimos durante la mañana del Domingo de Resurrección. El Desfile de este domingo es único en las celebraciones de la Semana Santa.

Todas las cofradías, hermandades y corporaciones participan recorriendo las mismas calles que ya vivieron la Procesión del Santo Entierro, pero en este Domingo de Resurrección la duración del acto no tiene nada que ver con la del Viernes Santo. De 6 horas pasa a ser de cerca de dos horas.

El Desfile de Resurrección lo abren las corporaciones marcando el paso rígido mientras las bandas de música inician las marchas de desfile y pasodobles que suenan de forma alegre por las calles del Marítimo. Después siguen desfilando hermandades y corporaciones según el orden cronológico de La Pasión.

El buen tiempo acompaña la celebración del acto más característico de la Semana Santa en Valencia, es por ello que las calles de los Poblados Marítimos se muestran llenas de gente que desea vivir en primer persona

La jornada de este Domingo de Resurrección se iniciaba con la procesión de Resurrección a cargo de la Cofradía de Jesús de Medinaceli. El festejo ha llegado a la Marina, lugar en el que se ha lanzando una corona de flores al mar en recuerdo de todas las personas que han perdido la vida en sus trabajos marítimos, además de rezar por los niños maltratados y por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que luchan por proteger a los más pequeños. Este acto ha cumplido en este 2018 su 26ª edición.