El homenaje al almuerzo valenciano que se puede disfrutar a cualquier hora del día

El protocolo del almuerzo valenciano vendría a sentenciar que todo empieza con cacahuetes y olivas, le sigue un bocadillo de verdad y no se acaba hasta que a la mesa llega un café tricolor. Ese A-B-C ha ido conquistando esas horas muertes entre el desayuno y la comida hasta convertirse en todo un evento social difícil de entender más allá de las fronteras valencianas. Sobre el almuerzo se han hecho muchas variaciones, pero siempre en las partes A y B, nunca en el C. Hay quien añade un previo con una cassalla 'arrancaora' y es obvio que no todo el mundo acaba con el famoso cremaet. Así que era fácil encontrar innovaciones en bocadillos o en las tapas que sirven para abrir el estómago y 'hacer hambre' a mitad mañana. En honor a ese final glorioso del almuerzo valenciano, Pepina Pastel ha lanzado la nueva Tarta Cremaet, un pastel que permite rendir tributo al almuerzo valenciano a cualquier hora del día.

La empresa valenciana dispone ya de todo un homenaje a la bebida más tradicional del almuerzo y lo hace convirtiendo en un dulce las tres capas que conforman el brebaje valenciano. Ron, café y crema hechos tarta para disfrutar a cualquier hora del día. Una simple cucharada permite al comensal viajar hasta el horario de media mañana y verse sentado en una mesa tomándose ese clásico café tras comerse un gran y completo bocadillo que permite cualquier relleno.

La Tarta Cremaet de Pepina Pastel incorpora una base de galleta María que permite comparar el postre con la típica tarta de queso, pero en boca no tiene nada que ver. Una cucharada es un viaje que empieza en el ron, suma el café y suma ese sabor inconfundible que deja la crema. No tendría sentido comer la tarta sin llevarse a la boca un poco de cada una de las tres partes del dulce.

Sin duda lo que más llama la atención y lo más potente en boca es ese toque a ron que caracteriza al buen cremaet valenciano, ese conseguido potente sabor del alcohol recién quemado. A ello hay que sumarle los bocaditos de chocolate que coronan la azotea de la tarta.

La empresa con base en Alzira lleva desde 2019 haciendo hueco en su carta a tartas diferentes, a homenajes dulces como aquella de churros y chocolate o la de horchata con fartons. Ahora la Tarta Creamet permite saborear a cualquier hora del día el café valenciano que corona un gran almuerzo y que ahora puede servir para cerrar todas las comidas del día.

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