Receta navideña del fin de semana: solomillo relleno de dátiles, orejones y ciruelas

Imagina el esplendor de servir un solomillo de cerdo, tierno y jugoso, relleno de una exquisita combinación de dátiles, orejones y ciruelas, todo envuelto en tocino ahumado que añade un toque de ahumado irresistible. Este plato no solo es un deleite para el paladar, sino también una obra maestra visual que encantará a tus seres queridos.

- 1 solomillo de cerdo

- 75 g de dátiles sin hueso

- 50 g de orejones

- 50 g de ciruelas

- 8 lonchas de tocino ahumado

- 1 manzana

- 1 hoja de laurel

- Pimienta en grano

- ½ vaso de coñac

- 2 ajos

- 2 cebollas

- Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE)

- Sal

- 2 cucharadas soperas de harina

- Hilo de cocina para bridar

- ½ litro de caldo de carne

Para preparar este delicioso solomillo relleno de frutas con salsa de coñac, comienza limpiando la carne, eliminando cualquier exceso de grasa o imperfección. Abre el solomillo como un libro y cúbrelo con lonchas de tocino ahumado. En una batidora, mezcla dátiles, orejones, ciruelas y manzana, previamente hidratados con coñac. Esta mezcla se convertirá en la farsa del relleno.

Coloca la farsa en un extremo del solomillo y pliégalo cuidadosamente, asegurándote de que el relleno quede dentro. Utiliza hilo de cocina para bridar el solomillo. En una cazuela con aceite de oliva virgen extra, marca el solomillo hasta que esté dorado y retíralo.

En la misma cazuela, pocha cebollas, añade harina y coñac, permitiendo que se desglase. Agrega medio litro de caldo de carne y la farsa restante. Vuelve a introducir el solomillo y deja hervir a fuego medio durante 20 minutos, volteándolo a los 10 minutos.

Retira el solomillo y cuela el caldo. Envuélvelo en papel de aluminio para conservar sus jugos y tritura lo colado para hacer una crema que servirá de base para el plato.

Una vez templado, corta el hilo del solomillo y córtalo en porciones de 2-3 centímetros de grosor. En el plato, coloca parte de la crema en la base, añade el solomillo y vierte encima el jugo colado. Si no se consume en el mismo día, guarda en el frigorífico y calienta en el horno con el papel de aluminio para evitar que se reseque. Este plato impresionará a cualquiera de tus invitados esta Navidad.

Esta, y muchas recetas más, la puedes encontrar en el blog 'Una receta, un recuerdo' de Santiago Hernández.