Los vinos de merseguera son tendencia

Es ya la tercera generación la que gestiona Bodegas Polo Monleón y que se inauguró hace ya más de 70 años en Titaguas, capital del vino en la comarca del Alto Turia. Hoya del Castillo es el marchamo con el que envasan sus vinos tintos, rosados y blancos. Los blancos se elaboran fundamentalmente con la uva autóctona de la región, la merseguera. Allí, en las alturas, también se le conoce como verdosilla, siendo la variedad es la más característica de esta tierra; una cepa rústica, resistente a la sequía y con unos granos de piel gruesa, que tardan en madurar al ser un viñedo de ciclo largo.

La labor de la familia Polo Monleón ha sido ímproba en las últimas décadas, cuando esta subzona de la DO Valencia parecía que nadie se acordaba de ella las bodegas Polo Monleón seguían con paso firme mostrando los buenos vinos que allí se producían. Desde se fundara en 1952 la bodega ha apostado por la calidad y el cuidado máximo de la uva. Son ciento setenta hectáreas de viñedo los que recaen bajo su responsabilidad, de principio a fin, un terruño de naturaleza arenisca y calcárea, muy accidentado, donde las viñas se cultivan en pequeños planos y mesetas, rodeados por barrancos y montañas, situadas entre 835 y 1.100 metros de altitud. Con el fruto de esas viñas de altura se elaboran vinos tintos jóvenes y de crianza, rosados y el extraordinario blanco de merseguera.

El trabajo de la merseguera

Durante estos últimos años, el esfuerzo por convertir sus vinos de merseguera en un referente ha obtenido sus frutos, son varios premios y reconocimientos los que ha recibido, como la medalla de plata en el concurso Mejor Vino del Mediterráneo que organiza Alicante Gastronómica (añada 2021), la Medalla de Oro en el Concurso de Monovarietales que organiza Proava (añada 2022), 92 puntos en la guía Sevi (añada 2022) y muy buenas perspectivas para los vinos de la añada 2023.

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