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A. Pedroche
Miércoles, 27 de marzo 2024, 00:39
Pronto se van a cumplir dos meses desde que Antonio Tejado ingresara en prisión como uno de los detenidos por asaltar chalets de lujo, entre los que se encuentra el de su tía María del Monte. El exmarido de Rosario Mohedano no lo ha pasado bien en prisión. Tuvo que ser trasladado a otro módulo de la cárcel Sevilla I. El pasado 15 de marzo, cuando acudió a los Juzgados para hablar de los presuntos delitos por los que decretó su ingreso en prisión, con carácter provisional.
Allí, según ha desvelado El Diario de Sevilla, aseguró convencido que su tía sabe que él no está implicado en el robo. También que «no entiendo por qué estoy en la cárcel. Yo no tengo nada que ver con esto. Soy inocente. No pertenezco a ninguna banda ni organización criminal. No he cometido ningún delito. Nunca he hablado de la casa de mi tía con nadie, ni de lo que tiene o deja de tener».
Su abogado, Fernando Velo, ha reconocido en 'Y ahora Sonsoles' que ha «solicitado la libertad de Antonio Tejado. Consideramos que no existen motivos suficientes para mantener la prisión provisional y que existen medidas alternativas igualmente eficaces para alcanzar los mismos fines».
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Además, el abogado aha asegurado que «Antonio tuvo oportunidad de explicar todos los elementos» -durante se declaración judicial- y ha señalado que la última llamada entre el televisivo y María del Monte tenía como motivo «la entrega del perro».
Amor Romeira ha adelantado en el programa 'Fiesta' que ha podido hablar con Antonio a través de su entorno y está totalmente destrozado: «Antonio Tejado dice que no existe ninguna prueba. No hay ningún objeto personal de su tía que haya sido localizado en su casa. No existe ninguna vinculación de él hablando sobre el robo de la casa de su tía con los implicados».
Además, ha aclarado cuál era su relación con el boxeador ruso Arseny Garibyan, uno de los cabecillas de la presunta banda criminal que también ha sido detenido. Tejado asegura que su trato con él era meramente deportivo ya que entrenaban en el mismo gimnasio. Por otro lado, respecto al hecho de que acudiera a la vivienda de su tía pocas horas después del robo, ha contado que no tenía nada que ver con lo que pasó: «Seré muy pesado y muy intenso, pero a mí mi tía me pide un perro y yo me tiro una semana queriéndole entregar al perro todos los días porque al ser cachorro llora, ladra y mea y es un capricho de mi tía yo no tengo porque estar cuidando al perro».
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