CLARA ALFONSO
Valencia
Miércoles, 15 de febrero 2023, 21:46
Con más de tres millones de seguidores en Instagram, Dulceida postula como una de las influencers más conocidas y consolidadas del país. La catalana de 33 años se ha convertido en un una empresaria de éxito e icono de moda, además de ser uno de los rostros más demandados en cualquier evento. Lo cierto es que su fama va más allá de redes sociales y es una de la famosas que han dado el salto al panorama digital desde estas plataformas, al igual que María Pombo, María Fernández-Rubíes o Laura Escanes, entre otras.
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Tras el nombre de Dulceida se esconde Aida Doménech, una joven que, con tan solo 20 años, decidió abrirse un blog en el que compartía fotografías de sus estilismos y de su estilo de vida. Cuando tuvo una comunidad más o menos consolidada, saltó a las redes sociales y su vida cambió de golpe. Su éxito, especialmente en YouTube e Instagram, es innegable y hasta el momento, ninguna otra influencer le ha podido quitar el puesto. Lo cierto es que, lo que comenzó siendo entretenimiento, ahora se ha convertido en un auténtico imperio.
Más allá de ser instagramer, la joven carga a sus espaldas sueños cumplidos que muchos de sus seguidores querrían alcanzar. Cuenta con un canal de YouTube con más de dos millones de suscriptores, ha publicado un libro 'Dulceida. Guía de estilo', tiene su propia aplicación, su propio perfume y una línea de ropa. Y por si fuera poco, es la creadora de un festival con su propia firma, el 'Dulceweekend', y de los 'Premios Ídolo', los primeros premios nacionales que ponen en valor el papel, la credibilidad e influencia de los creadores de contenido digital. También ha dado el salto a la televisión como asesora en el programa de 'Quiero ser' y es protagonista de 'Dulceida al desnudo', una docuserie sobre sí misma, original de Amazon Prime Video. Asimismo, desde que hiciera pública su relación con Alba Paul, se ha convertido en un icono del colectivo LGTBI+ y hasta tuvo su propia carroza en el Orgullo 2022.
La pareja se casó en septiembre de 2019 en una boda de cuento en la playa, que adoptó el nombre de 'Dulceweeding' y que ella misma compartió en su canal de YouTube.
Además, colabora con marcas de gran renombre, tanto a nivel nacional como internacional y ha sido el rostro de innumerables campañas publicitarias. Entre colaboración y colaboración, Dulceida comparte algo más que sus modelitos en Instagram. Su comunidad de seguidores también cuenta con clubs de fans que siguen cada uno de sus pasos y actualizaciones sobre su vida privada, que la empresaria también suele mostrar en su perfil.
Es por ello que su separación con Alba Paul fue muy comentada a la vez que criticada. La joven catalana decidía dedicar un emotivo mensaje a su ya ex-pareja vía Instagram para comunicar la noticia a sus seguidores. «Posiblemente esto es lo que más me ha costado escribir en mi vida», se sinceraba, antes de confesar: «Alba y yo hemos decidido seguir nuestros caminos por separado».
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« Han sido unos meses muy duros, tristes, de conversaciones infinitas», que llevaron finalmente a que la pareja tomase «la decisión más difícil» que habían tomado nunca, según dijo Dulceida en su publicación.
Alba también compartió su punto de vista a sus seguidores: «Realmente puedo decir que es de las situaciones más difíciles que he tenido que vivir, lo hemos pasado muy mal, hemos intentado luchar, pero a veces no es suficiente y hay que saber hasta dóde uno puede llegar y dejar que cada cual siga su camino», confesó en Instagram:
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Y es que la ruptura de ambas se remontaba a meses atrás. Aida y Alba ya admitieron estar pasando por una fuerte crisis de pareja, y decidieron pasar el verano separadas. En aquel momento, las influencers pidieron «respeto» a sus seguidores, y mantuvieron en secreto las razones de su separación.
Al ser un rostro público, siempre está expuesta a las críticas y ha llegado a cerrarse las redes durante algún tiempo por el machaque recibido. Cada imagen o vídeo subido a sus redes sociales, puede ser objeto de crítica. Este fue el caso de varias fotografías que publicó durante un viaje a Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, junto a Alba, en las que fue criticada por subir imágenes en una bañera mientras la ciudad sufría una grave sequía, o por regalar unas gafas de sol a unos niños. También ha sido juzgada por no tener el título de Educación Secundaria o por defender a las modelos 'curvy' cuando, en un principio, su marca no tenía tallas grandes.
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Todo lo que toca Aida se convierte en oro. Su fama se ha extendido también a su entorno, a quien comparte con naturalidad en sus redes sociales. Su hermano Álex Doménech se dedica a la moda y a su imagen gracias al empujón que le dio el fenónemo Dulceida. Al igual que su madre, Anna Pascual, con la que la joven ha creado una agencia de representación de influencers que se llama Inmanagement.
Con respecto a su sueldazo, ella misma ha asegurado en varias ocasiones que el 80% del contenido que aparece en su cuenta de Instagram no es remunerado. El 20 % restante sí es abiertamente publicitario, aunque nunca ha revelado cuánto gana por cada post. No obstante, se rumorea que puede percibir entre 5.000 y 8.000 euros por publicación y en 2021 llegó a facturar a través de su empresa 'Dulce Week End SL' algo más de 2,4 millones de euros.
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