Muere Carlos Jesús, el vidente de Raticulín que Arús y Cárdenas lanzaron al estrellato

Carlos Caballero Rey, más conocido como Carlos Jesús, ha fallecido a los 80 años en su ciudad natal, Dos Hermanas (Sevilla), el pasado 27 de enero, aunque la noticia trascendió ayer. Con su partida se despide una de las figuras más emblemáticas y excéntricas de la televisión de los años 90.

Nacido el 24 de enero de 1945, Carlos Jesús alcanzó la fama por su peculiar personaje de vidente y curandero, convirtiéndose en un auténtico fenómeno mediático. Su primera aparición televisiva fue en el programa 'Al Ataque', de Antena 3, presentado por Alfonso Arús, donde fue entrevistado por Javier Cárdenas. Fue aquí donde empezó a ganar notoriedad, destacando por sus extravagantes relatos sobre su vida y su 'misión divina'.

Sin embargo, su verdadero despegue llegó cuando Javier Sardá decidió incluirlo en su programa 'Crónicas Marcianas', en el que aprovechó el perfil único de Carlos Jesús para crear secciones humorísticas. Carlos Jesús afirmaba ser la reencarnación de Jesucristo y aseguraba provenir de un planeta llamado Raticulín, del que decía que llegarían 100.000 naves espaciales. Estas afirmaciones, junto a su estilo peculiar y su carisma, hicieron de él una de las personalidades más recurrentes en la televisión.

Carlos Jesús era conocido también por dividir su personalidad en dos personajes: Crístofer y Micael. Cuando adoptaba la identidad de Micael, hablaba con voz de robot y se identificaba como la voz de Jesús. Crístofer, por su parte, era el encargado del mantenimiento de las naves espaciales de Raticulín. Estas dos personalidades fueron una de las características que lo hicieron aún más popular en la pantalla.

Durante su carrera televisiva aseveró, entre otras excentricidades, que tenía unos «microchís» que le otorgaban poderes para reparar ordenadores. El vidente también aseguraba haber muerto dos veces, ambas por descargas eléctricas en dos cadenas de montaje diferentes. Decía que Jesús se le había aparecido frente a una churrería y le había encomendado la misión de sanar a la gente en la Tierra. Y también explicaba que había estado en Ganímedes, en la constelación de Orión, en varias estrellas Beta y en el Sol. Según Carlos Jesús, el sol no quemaba.

El vidente llegó a instalar en un garaje de Sevilla una capilla a la que acudían centenares de personas para recibir sus poderes curativos.

Después de su apogeo en la televisión, Carlos Jesús desapareció de la vida pública. Jesús Chavero, un amigo cercano, explicó ayer en un programa 'Y ahora Sonsoles' que él nunca quiso que su muerte fuera noticia, ya que estaba profundamente afectado por la historia que lo hizo famoso, la cual perturbó su día a día.

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