El príncipe Harry abandona «devastado» la ONG que fundó en memoria de Lady Di tras las acusaciones de «racismo y misoginia»

Nuevo varapalo para el príncipe Harry. El hijo de Carlos III y Diana de Gales ha presentado su renuncia y abandona la organización benéfica Sentebale, fundada en 2006 en honor a su madre, Diana de Gales, para luchar contra el SIDA en África. Y lo ha hecho como consecuencia de una serie de disputas con los integrantes de esta ONG, una trifulca que ha generado una gran controversia.

El terremoto ha estallado después de que la presidenta de la fundación, Sophie Chandauka, haya denunciado en declaraciones al 'Daily Mail' «la débil gestión ejecutiva, abuso de poder, la intimidación, el acoso, la misoginia y discriminación contra las mujeres negras» en la fundación.

Ante esta situación, el príncipe Harry ha confesado estar «conmocionado». Y es que, el duque de Sussex fue uno de los fundadores de Sentebale, hace casi 20 años, junto al príncipe Seeiso de Lesoto.

«Con gran pesar, hemos renunciado como patrocinadores de la organización hasta nuevo aviso, como muestra de apoyo y solidaridad con los miembros de la junta directiva que han tenido que hacer lo mismo», han dicho los príncipes Enrique y Seeiso en un comunicado conjunto publicado el martes a última hora. «Lo ocurrido es impensable. Estamos conmocionados por tener que hacer esto, pero tenemos una responsabilidad con los beneficiarios de Sentebale», han señalado.

Los cinco miembros del consejo de administración de Sentebale habían pedido la renuncia de su presidenta, la abogada zimbabuense Sophie Chandauka, quien asumió el cargo en julio de 2023. Chandauka tomó represalias conduciéndolos ante el regulador británico Charity Commission y llevando el caso ante el Tribunal Superior de Londres, lo que desembocó en la dimisión colectiva de los disidentes.

Sophie Chandauka afirmó en un comunicado que se atrevió «a denunciar los problemas de mal gobierno, mala gestión, abuso de poder, intimidación, acoso, misoginia y racismo» hacia las mujeres negras en la ONG. «Hay gente que se comporta como si estuviera por encima de la ley (...), luego se hace la víctima y utiliza la prensa, a la que desprecia, para perjudicar a quienes tienen el coraje de cuestionar su conducta», criticó Chandauka.

La ONG, que ayuda a jóvenes de Lesoto y Botsuana afectados por el VIH y SIDA, pasaba ya dificultades tras el traslado de sus operaciones a África y la marcha de varios de sus miembros, según informa el Times.

«Estamos devastados porque la relación entre los miembros y la presidenta de la junta se ha deteriorado irreparablemente, creando una situación insostenible», han añadido los príncipes Enrique y Seeiso. Los dos cofundadores han añadido también que habían compartido «sus preocupaciones» con la Charity Commission.

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