Un buen chico. «Mi suegra le diría que soy el yerno perfecto, pero mentiría». henar sastre

«Sueño cada noche con la cara de Leonardo»

«Acusado injustamente de sodomía, hoy Da Vinci estaría en alguna lista negra tipo #MeToo» Christian Gálvez Escritor y presentador

ARANTZA FURUNDARENA

Domingo, 3 de junio 2018, 00:58

La gran exposición sobre Leonardo da Vinci prevista para otoño en Madrid tiene un comisario muy reconocible: Christian Gálvez. Sí, el presentador de 'Pasapalabra'. Porque además de estrella de la tele, fan del 'heavy metal' y de los tatuajes, Gálvez, es una autoridad en Leonardo. Para él es casi una obsesión.

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- ¿Qué hay de nuevo sobre Da Vinci?

- La exposición se titula 'Los rostros del genio' y trae a España por primera vez la 'Tavola Lucana', el principal autorretrato de Leonardo.

- ¿Y cómo era él?

- Un tipo que fracasó y se marchó a Francia. Aquí podemos hablar de fuga de cerebros y calificarlo de refugiado, puesto que los estados italianos estaban en guerra.

- Y que rechazaba las relaciones sexuales...

- Desde los 24 años hasta los 67 practicó el celibato. Si era homosexual, como dicen algunos, lo sería desde un punto de vista platónico.

- ¿Qué le llevó a ser tan casto?

- Pudo ser por una acusación injusta de sodomía. Supuestamente se aprovechó de un joven en el taller. Estuvo dos meses en la cárcel, pero salió por falta de pruebas. A partir de ahí, dijo que no pensaba practicar «esa asquerosidad llamada sexo».

- ¿Estaría hoy Da Vinci en la lista negra del #MeToo?

- Pues más o menos. Estaría quizás en la línea de Kevin Spacey. Pero él fue acusado de manera injusta. Cuando se celebró el juicio nadie se presentó, nadie corroboró, con lo que todos fueron absueltos. Eso sí, hoy día a pesar de la falta de pruebas hubiésemos emitido un juicio popular sobre él.

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- ¿Qué le arrebata de Leonardo?

- Su perseverancia. El que fuera una persona ilegítima e iletrada y con altas posibilidades de ser bipolar, disléxico y con síndrome de déficit de atención. Y que a pesar de todo eso, gracias a su infinita curiosidad se convirtiera en alguien al seguimos admirando.

- ¿Lo suyo es una adicción?

- Yo le diría que no, pero mi mujer opina que sí.

- ¿Qué es lo más inconfesable que ha llegado a hacer?

- Una mañana me levanté y le dije a Almu (Almudena Cid, su mujer): Cariño, me voy a París y vengo para comer. Exponían la Santa Ana, junto con la Gioconda y la Gioconda de El Prado. No podía perdérmelo.

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- ¿Persigue una meta?

- Ser feliz, je, je... Y ya lo soy. Pero dentro del proyecto internacional al que pertenezco, Leonardo DNA Project, mi objetivo es conocer la cara de Leonardo de verdad. Sueño con ella cada noche...

- A veces detrás de un genio hay un ser mezquino.

- Él era un mercenario, no cumplía la palabra dada. Y si tú le dabas 10 florines para pintar un cuadro y otro le daba 12, te dejaba tirado. Pero todo lo invertía en investigación.

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- Mucho Leonardo pero lleva un tatuaje de Miguel Ángel.

- El famoso fragmento de la Capilla Sixtina. Tardaron en hacérmelo treinta horas. Fue dolorosísimo.

- ¿Es usted el yerno perfecto que aparenta ser?

- Mi suegra le diría que sí. Pero mentiría. La que no miente es la tele. Lo que se ve es lo que hay.

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