Se busca peluche perdido

¿Quién no ha perdido a su peluche del alma o su muñeca preferida?. El juguete más querido siempre es el más expuesto. Es el que más sale a pasear, el que acaba espachurrado entre sueños o circula en modo 'torniquete' en los brazos de su pequeño portador, carrito en marcha.

Y cuando se pierde, el asunto 'muñeco de trapo' puede desencadenar un auténtico drama infantil. Lloros, pataletas y una ausencia difícil de llenar.

Muchos padres recurren al 'cambiazo' express pero, a veces, ese 'loco bajito' se da cuenta de que le han dado 'gato por felpa' y el remedio es incluso peor.

Los padres de Javi lo han intentado todo desde que perdieron la pista de Elly, un elefante azul de trapo que se extravió este sábado, cerca de un supermercado de Torrent Avinguda. Su pequeño de cuatro años ha dormido con él desde que nació y su abrupta ausencia ha sido el primer serio revés del pequeñín.

Sus progenitores, Víctor y Ana, conscientes de la importancia de Elly para su retoño volvieron al lugar en que habían perdido la pista del peluche hasta en tres ocasiones. "Deshicimos el camino andado, miramos por el aparcamiento, debajo de los coches, preguntamos por los comercios de alrededor por si alguien lo había recogido y hasta fuimos a la oficina de objetos perdidos". Pero nada. Ni rastro del paquidermo con costuras.

Dispuestos a localizar al elefante de felpa a toda costa, no han dudado en apurar todas las opciones. Llamaron a la casa que los fabrica pero el peluche en cuestión está descatalogado. Después pusieron carteles de 'Se busca'. En pocas horas su rastreo se convirtió en una búsqueda multitudinaria, a la par que multimedia.

"Hay una página de facebook en Torrent que compra y vende cosas y pensamos en poner ahí un anuncio. Después saltó a las redes sociales y en estos tres días lo ha compartido muchísima gente. no pensábamos que pudiera tener tanta trascendencia algo así, la verdad", comentan un poco abrumados.

Los padres de Javi quitan hierro al asunto y saben que "hay problemas mucho más importantes y serios, desde luego que sí, pero sabemos que Elly es importante para Javi y no hacemos nada malo en querer encontrarlo", cuenta el padre. Incluso, ofrecen una pequeña "recompensa" si el elefante vuelve a casa. De momento, la familia sólo ha recibido un par de llamadas, una "gastanto una broma y otra de mal gusto". Pero no pierden la esperanza de que alguien que un día también perdió algún juguete muy querido, les llame para decirles que el pequeño Javi ya puede volver a abrazar a Elly.