La patrulla medioambiental de Torrent rescata un avetoro de una terraza

Unos vecinos de la calle Azorín, en pleno centro de Torrent, se encontraron en su patio de luces un ave poco común que yacía en el suelo malherida. La llamada a la patrulla de Medio Ambiente probablemente le salvó la vida, ya que el ejemplar de avetoro (Botaurus stellaris), presentaba un fuerte golpe en las alas provocado, tras un primer examen, por el choque contra una antena o quizás algún cable.

Esta especie, en peligro de extinción, no es común en el hábitat natural de Torrent, aunque vive en lugares húmedos como marismas y zonas pantanosas, por ello se cree que seguía el trayecto de migración hacia la Albufera pero se desorientó o voló demasiado bajo hasta que se golpeó y la suerte hizo que aterrizara en el interior de una vivienda y no en plena calle.

Los agentes medioambientales recogieron al animal que seguía intentando remontar el vuelo como podía desde el suelo de la terraza. Después de cogerla con cuidado, la trasladaron al Centro de Recuperación de Fauna de El Saler, donde tratarán de curar sus heridas y, una vez sana, soltarla para que se integre de nuevo en su hábitat natural.

Esta no es la primera vez que la patrulla rescata a animales que se desorientan o que por causas que se desconocen aparecen en pleno casco urbano. Hace unos meses, una serpiente llegó hasta el barrio El Molí zigzagueando por la carretera hasta que un vecino la descubrió y la salvó de una muerte segura bajo los coches.

Aunque no era venenosa, la culebra de escalera, una especie común en los parajes naturales de Torrent, causó la alarma entre los residentes durante el poco tiempo que pasó en la calle. Los agentes se encargaron de recogerla y trasladarla a una zona rural, donde la soltaron.

Más habituales son los rescates de animales en los propios parajes naturales. Hace también un tiempo, la patrulla se encontró un pequeño mochuelo en el camino de Pardala, con un ala rota. En este caso la suerte quiso que los agentes dieran con él antes de que lo hiciera un depredador, aunque sus heridas impidieron que el mamífero pudiera recuperarse.

Los atropellos de mamíferos suelen ser frecuentes en los caminos rurales y muchas veces, la patrulla tiene que retirar de la calzada erizos, e incluso algún zorro, culebras y aves. Quizás se podrían haber evitado si el vehículo fuera a una velocidad más adecuada para estas carreteras en las que el medio natural delimita con el camino.

Pero sin duda, lo que más llama la atención es cuando los animales llegan hasta las zonas pobladas, como es el caso del buitre leonado que hace unos días se paseó por la zona de Valterna, en Paterna, convirtiéndose en toda una atracción para los vecinos que lo observaban y echaban mano de sus móviles.