El ejecutivo socialista de Rafelbunyol impide que prospere la reprobación al alcalde por vacunarse de manera irregular

El alcalde de Rafelbunyol, Fran López, no dimitirá así lo ha refrendado en la sesión plenaria convocada por la oposición en bloque para su reprobación por haber sido el primer alcalde de España en vacunarse de manera irregular. La iniciativa no ha prosperado con los siete votos en contra del equipo de gobierno socialista, frente a los tres del PP, los dos de Compromís y uno de Ciudadanos.

Ante las acusaciones de los portavoces de PP, Compromís y Cs, que piden su dimisión, López ha explicado la situación, justificando su presencia en la residencia Verge del Miracle como alcalde y presidente del consejo de administración del centro para dirigir el dispositivo de la llegada de las vacunas. El primer edil ha dejado la responsabilidad en el equipo de vacunación “fueron ellos los que me lo propusieron, después de que sobraran cuatro dosis”, aunque les ha mostrado su apoyo, y ha hecho referencia a que era la primera vez que se iniciaba el proceso.

“En principio dije que no, pero ante la posibilidad de que se iba a perder cambié de opinión. Ahora, en perspectiva, ha sido la decisión menos acertada que he tomado nunca”, ha señalado y ha añadido que “si hubiera llamado a otra persona habría cometido un abuso de poder”.

Tras dar explicaciones, López ha denunciado la campaña de “linchamiento social y mediático, alentada por la oposición” que sufre desde hace 35 días, junto a miembros de su familia, con “insultos y deseos de muerte”, además de pintadas en su coche y en el cementerio municipal, y carteles por todo el pueblo.

En esta línea, ha apuntado que las muestras de afecto y el apoyo de los ciudadanos “es lo que me hace estar aquí” y “seguiré reconstruyendo el pueblo del siglo XXI porque así lo han querido las urnas”. “Este proyecto al que me debo y al compromiso, continúan vigentes y por eso continuaré gestionando” ha añadido, “sin ira ni rencor porque lo entiendo y lo respeto”. Por último, se ha dirigido a los vecinos para decirles que “lo mejor está por venir”.

Estas palabras no han calado en los grupos de la oposición que han criticado su papel de “víctima”. Los portavoces, en su primera intervención, han insistido en hechos como la “ocultación”, tras inyectarse la primera dosis, a pesar de que señaló de que lo hizo “para dar ejemplo” y lo acusan de “saltarse el protocolo sanitario por entrar a la residencia poniendo en peligro a los usuarios y trabajadores”.

Además, han hecho referencia al cese de la directora general de Salud Pública, Elvira Mensat, “vecina del municipio”, tras emitir un informe sobre las dosis sobrantes y “que le ha costado el puesto”. Junto a todo esto, han criticado que haya “renunciado a la segunda dosis porque deja sin efecto la primera” y le han echado en cara que el pleno se haya convocado de oficio. También ha señalado al equipo de gobierno socialista como "cómplices por su apoyo a López".

La concejala de Cs, Asunción García Botet ha señalado como “histórica” la unión entre los miembros de la oposición para hacer esta petición. “Las normas son para todos iguales, sin excepción”, ha recordado a López y ha añadido que “en esta vida hay que pensar”, en referencia a la justificación que dio el alcalde en su momento. “Rafelbunyol no se merece ser conocido por estos hechos”, ha concluido.

El portavoz de Compromís, Mario Carrera ha coincidido con García Botet y le ha recriminado “el abuso de su cargo cuando tiene que ser un ejemplo para la ciudadanía”.

Desde el PP, su portavoz, Miguel Saborit le ha acusado de que “tiene el honor de ser el primer alcalde vacunado de España, sin pertenecer a ningún grupo de riesgo. En un acto de egoísmo extremo, le quita la vacuna a cualquier persona mayor del pueblo que podía inmunizarse y salvar su vida” y ha añadido que “no entendemos como sus seis concejales le sigue apoyando”. De igual modo, le ha reprochado que “se aferre a sus 46.000 euros anuales”. “Es una cuestión de dignidad. Usted ya es el alcalde vacunajeta”, ha concluido.

Respecto a las declaraciones de López y la campaña de difamación, los portavoces han coincidido en su postura al condenarlas, pero tal y como ha señalado Carreras (Compromís), "usted es el único culpable" y se le ha insistido en que "dimita", para que acabe.