La pandemia se lleva por delante la falla del Mar de Tavernes con más de 20 años de historia

La pandemia se ha llevado por delante la ilusión de la comisión del Mar de Tavernes Blanques, tras 23 años 'fent falla'. Como explica la responsable, Nerea Bayarri la situación "es insostenible". "Somos 25 personas y con las cuotas no podemos pagara ni el alquiler del casal", señala. Durante estos meses, han organizado una 'apuntà' virtual, buscando al menos una treintena de nuevos componentes, que son los que necesitan para poder mantenerse.

También han solicitado colaboración de las dos comisiones locales y de otras localidades para buscar asesoramiento o ideas con las que atraer a nuevos falleros pero "todo ha sido inútil". "A la gente le da pena, pero nadie se apunta, aunque sabemos que la situación está complicada por las consecuencias económicas de la pandemia", comenta Nerea. En sus mejores momentos la falla ha rondado los 80 falleros y ahora "hemos perdido la mitad del censo en este año".

A pesar de los esfuerzos, la decisión aprobada por la junta con mayoría absoluta ha sido la de echar el cierre definitivo, aunque esperan poder quemar el monumento de 2020 para "poder despedirnos como toca con un fin de fiesta". La comisión está convencida de que "aunque no esté en funcionamiento, la falla del Mar estará en el corazón de muchas personas".

Mientras tanto, han solicitado al Ayuntamiento un local donde guardarla, ya que en estos momentos ocupa parte del casal, pero la única solución que les han dado ha sido la de "pedir al artista fallero una carpa para dejarlo a la intemperie, en un lugar protegido", algo que no acaba de convencer a la comisión.