Héroes que visten de uniforme

La visita de la delegada del Gobierno, Gloria Calero, a Massamagrell para agradecer la intervención de la Guardia Civil y la Policía Local en un caso de violencia de género en el que los agentes lograron salvar al vida a una mujer de 53 años, sirvió para que los héroes con uniforme de ambos cuerpos se conocieran.

El encuentro tuvo lugar a las puertas del ayuntamiento y se fundieron en un abrazo, visiblemente emocionados. En el momento de los hechos el pasado lunes, ninguno de ellos tuvo tiempo de cruzar apenas unas palabras. Los policías locales, Baltasar Gamito y Víctor Tomás fueron los primeros en llegar y ver a la víctima, Mayte, sobre un charco de sangre.

"Varias personas estaban asistiéndola y me dijeron que allí estaba el agresor", relató Baltasar. "Venía hacia mi con las manos en la espalda y los testigos me advirtieron de que llevaba un cuchillo así que saqué mi arma reglamentaria y le repetí en varias ocasiones que mostrara las manos".

"Al final obedeció y lo engrilletamos. Ya en el suelo, con una frialdad tremenda, manifestó que había venido a Massamagrell a matarla", explicó. "Después de 15 años de servicio, no estás preparado para estas cosas, tienes que vivirlas", señaló, "hay que tomar decisiones en décimas de segundo que son trascendentales".

Los agentes reconocieron que "tuvimos miedo pero lo más importante es que ella ha sobrevivido y él está detenido". En cuanto a los reconocimientos oficiales señalaron que "se agradece que se tenga en cuenta el trabajo policial pero es nuestra obligación profesional y moral".

Los otros dos héroes con uniforme son los guardias civiles Damián Salido y Francisco Rodríguez, del cuartel de Massamagrell, que llegaron después al lugar de los hechos pero tomaron la más que acertada decisión de trasladar a la víctima en su vehículo hasta el centro de salud, taponándole la herida del abdomen, que fue clave para salvarle la vida.

Ayer, a las puertas del cuartel declararon que "es un orgullo personal y un orgullo para el benemérito cuerpo que representamos. Lo más grande que puede hacer un guardia civil es salvarle la vida a un persona". "La esencia de la Guardia Civil es ayudar y proteger a los ciudadanos a costa de nuestra vida si fuera necesario", añadieron. "Volveríamos a hacer lo que hicimos porque somos del pueblo y para el pueblo". Los agentes señalaron que la mujer se está recuperando favorablemente en el Hospital Clínico y que pronto podrá regresar con su familia.

La delegada del Gobierno, Gloria Calero, acompañada por el subdelegado, Rafa Rubio, el general jefe de la VI Zona de la Guardia Civil, José Hermida, y el alcalde, Paco Gómez, reconoció "la labor de los agentes y de los vecinos que salvaron a la última víctima de violencia machista en la Comunitat Valenciana de morir acuchillada por su expareja".

La delegada reiteró que "atentados brutales" como este evidencian que "cualquier mujer puede sufrir esta violencia que ha dejado de ser un asunto privado y que cuenta con la repulsa social". Además, destacó “la importancia de que el entorno ayude a la víctima y se comprometa a denunciar también estos hechos”.

Según los datos aportados por Calero, en las prisiones valencianas hay más de 800 internos que cumplen condena por delitos de violencia sobre las mujeres. También en estos momentos hay 10.000 mujeres de la Comunitat que forman parte del sistema de vigilancia integral del Ministerio del Interior.

Por su parte, el alcalde, Paco Gómez explicó que el Ayuntamiento se sumó al programa Viogen en la legislatura pasada y el año pasado renovó el convenio. Con ello, la localidad es una de las cien que se han integrado en este sistema, a través del cual la Policía Local protege alrededor del 35% de las mujeres del municipio que están inscritas en él, y del resto se encargan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.