Una comisión de Sedaví hará la cremà gracias a 60 donaciones de ninots

La solidaridad fallera se ha notado este año más que nunca debido a la tragedia de la dana sucedida el pasado 29 de octubre. Es lo que ha ocurrido en la comisión Nou Sedaví, que ha pasado de no poder plantar las dos fallas al quedar arrasadas a realizar una emotiva cremà fruto de las donaciones.

La dana entró con fuerza en la nave donde ya se guardaban los monumentos, recuerda este lunes una de las tres presidentas de la comisión, Nuria Díaz, antes de visitar con otros integrantes una de las residencias del municipio. «Tan sólo quedó el ninot central, todo lo demás desapareció, quedó arrasado», lamenta.

No había nada que quemar, aunque la maquinaria de la solidaridad se puso en marcha de inmediato. Nuria comanda la comisión junto con Xusa Gascó y Lorena Nieto y en un trabajo colectivo empezaron a gestionar donaciones de ninots. «Las otras tres fallas de Sedaví nos han donado», destaca con orgullo y la voz tomada a pesar de quedar algunos días de fiesta.

Alrededor de sesenta ninots recibidos de todas partes han podido formar las dos fallas, que arderán este miércoles como manda la tradición. «Han llegado ninots de Dénia, Foios, Almussafes y Valencia, entre otras partes», comenta, para destacar también las donaciones particulares, incluso anónimas. Está por ejemplo el caso de Alicia Moreno, fallera mayor de Valencia en 2016, que ha dado el ninot indultado de la falla municipal en su reinado. La comisión organizó tres jornadas de recogida de ninots a finales de febrero que resultaron todo un éxito.

«Una fallera de la corte del pasado año en Valencia también nos ha dado su ninot», subraya, antes de enumerar otras localidades de l'Horta que han aportado hasta completar las dos fallas. Este año en Sedaví no hay competición al decidirlo la Junta Local y se entregarán unos estandartes comunes.

La nave quedó arrasada por las inundaciones, aunque han conseguido reconstruirla. «Hemos hecho las actividades previstas», dice una de las tres presidentas al referirse a la compra de todo el mobiliario y equipamiento necesario. Todos los recuerdos se han perdido o quedaron gravemente dañados, como los estandartes, fotografías y documentos.

Así, la fallera mayor, Marta Parra Villar, y el presidente infantil, Héctor Rocafull Iranzo, han podido disfrutar de toda la agenda festiva. «La gente tiene ganas de fiesta», resume la presidenta en relación con la situación tan anormal de este año. Eso sí, la plantà con los ninots donados la han hecho integrantes de la comisión. Los artistas contratados antes de las inundaciones tienen el taller en Catarroja y también han sufrido daños. «Bastante trabajo han tenido», resume.

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