Un incendio por un enganche ilegal a la luz deja 21 intoxicados por humo en Aldaia

Una veintena de personas resultaron intoxicadas ayer por humo en un incendio originado en el cuadro de contadores de una finca de la calle José Echegaray de Aldaia. Las primeras hipótesis que barajan los investigadores apuntan a un enganche ilegal a la luz como origen del fuego. El aviso se recibió a las diez de la mañana y hasta allí se desplazaron una dotación y un mando de Torrent así como profesionales y vehículos de Paterna, todos ellos del Consorcio.

 Los efectivos tuvieron que rescatar a los vecinos que seguían en sus domicilios al ser un día festivo. Las viviendas más afectadas, de las 18 de la finca, fueron las ubicadas en el primer piso, aunque el humo se extendió por la escalera y alcanzó las plantas superiores. A las 10:43 horas se dio por extinguido.

Miguel estaba durmiendo en su casa del segundo piso cuando se despertó alarmado por los gritos de su madre de «fuego». El joven cuenta que abrió la puerta y al ver el humo se quedaron dentro de casa «hasta que vinieron los bomberos y nos desalojaron». Los tres miembros de la familia, él, su madre y su hermano, con sus perros, salieron del edificio y no necesitaron asistencia médica. Otra vecina de este mismo piso se sentía agradecida por no estar en casa en esos momentos. «Suerte que ha venido mi hija a por mi, porque casi no me veo», comentaba.

Juan Manuel, un vecino de la finca de enfrente, relató como su hija, Cristina, «no se lo pensó dos veces y se metió en el patio con la mascarilla aunque el humo que había no dejaba ver nada. Sacó a mi nieta y a dos vecinos más», dijo. «Salió toda negra, y le hicieron una prueba en la ambulancia. Se la han llevado al hospital, aunque han dicho que está bien y probablemente la envíen a casa», comentó aliviado.

Otro de los residentes cercanos apuntó que «si llega a pasar a la una de la noche hubiera sido mucho peor», ya que la mayoría de los vecinos ya estaban despiertos cuando se inició el fuego y pudieron salir por su propio pie al percatarse del humo.

Los heridos fueron trasladados a los hospitales más cercanos, La Fe, el General y el de Manises, aunque a lo largo de la tarde muchos de ellos recibieron el alta y pudieron regresar a sus respectivos domicilios.

Para los que se quedaron el panorama era desolador. Paredes ennegrecidas, un olor a quemado persistente y sin luz. «No sé qué vamos a hacer con estas condiciones. Tenemos que estar sin luz y dormir con este olor», comentó uno de los afectados.

Desde el Ayuntamiento confirmaron a este periódico que los técnicos revisarán el edificio para certificar que las familias puedan volver a sus viviendas, y de que están recibiendo atención desde el propio Consistorio y la Mancomunidad del Barrio del Cristo para buscar una solución habitacional en cada uno de los casos. Mientras, la policía, sigue con la investigación de las causas del incendio.

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