Esperanza 'valenciana' de un presidente «competente»

El relevo en la Casa Blanca también fue seguido muy de cerca en la Comunitat, donde residen alrededor de 4.000 estadounidenses, la mayoría en la provincia de Valencia y Alicante. A pesar de los miles de kilómetros que les separan de su país, muchos estuvieron atentos ayer a la atípica toma de posesión de Joe Biden como nuevo presidente, marcada por pandemia y por la ausencia de Donald Trump. Mientras residentes republicanos preferían no comentar nada, los demócratas afincados en tierras valencianas decían estar ilusionados de tener al frente del Gobierno a una persona «competente».

Ese sentimiento de esperanza también se podía palpar entre varios integrantes de la comunidad de norteamericanos que vive en Dénia, donde hay censados casi un centenar de personas procedentes de Estados Unidos.

Mickey Neeley, jubilado de Virginia, lleva dos años en la capital de la Marina Alta. Ayer estuvo viendo la ceremonia por televisión para «asegurarme de que realmente pasa, que se va y entra Biden». Reconoce abiertamente que antes era republicano y que tiene amigos que, como él, han cambiado de opinión debido al comportamiento de Trump. Según explica, en un principio muchos le dieron su apoyo porque «esperaban que cambiara, pero no cambió».

Tras presenciar con gran «inquietud y preocupación» el reciente asalto al Capitolio, señala que está bien protestar cuando no se está de acuerdo con algo. Pero recalca que entrar en el edificio que alberga las dos cámaras del Congreso supone traspasar los límites. A su juicio, el dirigente republicano perdió una oportunidad de hacer cosas por su país y, «en lugar de resolver problemas se dedicó a utilizarlos para tratar de volver a ser elegido».

Ahora, con el nuevo ocupante del Despacho Oval, cree que llegarán los cambios. Para Neeley, lo más importante ahora radica en bajar la temperatura en el conflicto entre republicanos y demócratas. «Biden, por naturaleza, se esforzará en conseguirlo porque lo que Estados Unidos necesita en este momento es tener a ambos bandos trabajando juntos».

Este residente de Virginia es consciente de que los cambios llevarán tiempo, no se producirán de la noche al día. No obstante, insiste en que la clave se encuentra en que tanto el presidente como el Gobierno sean «competentes».

Lo que necesita el país tras estas últimas semanas tan convulsas es un Joe Biden «eficiente y aburrido, en el sentido de que no salga cada día en las noticias y no se centre en las redes sociales», comenta en referencia a su predecesor.

En cuanto a Trump, está seguro de que será «incapaz de quedarse callado mucho tiempo» y que pronto volverá por sus fueros.

Amalia Maloney, de Florida, y Eric Trujillo, de Colorado, son un pareja que lleva seis años en España y que tras pasar un corto período de tiempo en Valencia y en Xeraco se asentó en Dénia. Ella, con sangre asturiana en sus venas por parte de su abuelo, está vinculada a la creación de contenidos y diseño de páginas web. Él es ilustrador y realiza animaciones. Ambos no se quisieron perder el juramento Biden como muestra de apoyo.

Para Amalia Maloney, se trata de un momento que pasará a la historia, un paso adelante para que el país recupere su esplendor porque ella comparte la opinión de aquellos que consideran que durante el mandato de Trump «Estados Unidos ya no era el país que ellos conocían». Con muchos aspectos «discriminatorios» y en el que «no sólo se han permitido las mentiras, sino que se ha dicho que está bien mentir».

Por ello, todo lo sucedido en Washington DC, donde tiene familia, no le resultó tan sorprendente, aunque sí hizo que se entristeciera y se enfadara. Critica que el ya expresidente «alentara el odio» que avivó la revuelta que acabó con el asalto al Capitolio porque «no creo que el odio sea el camino para resolver las diferencias».

Una división que también se refleja en las familias, con simpatizantes de uno y otro bando enfrentados. En su caso, decidió tiempo atrás que lo mejor era no abordar cuestiones relacionadas con la política, ya que «prefiero mantener buena relación con mi padre».

Está segura de que con Biden llegarán nuevas maneras que permitan a la nación «recuperar el respeto perdido con Trump, porque ser americano ya no es lo mismo que antes«. La experiencia adquirida junto a Obama »le servirá de mucho«. Según relata, al blog de viajes, gastronomía y cultura que tiene con su pareja también les contactan personas que quieren irse porque »están cansados por la situación« de los últimos años. Panorama que espera que cambie con este relevo.

También hace hincapié en que el país asiste a un momento histórico con la primera mujer que ocupa el cargo de vicepresidenta, Kamala Harris.

Eric Trujillo también cree que con el nuevo presidente se van a producir virajes en las líneas de trabajo y cambios estructurales en el Gobierno. «Los primeros diez días Biden tiene una gran agenda para revertir las políticas de Trump», destaca. Entre las cuestiones en las que confía que incida están las relacionadas con el medio ambiente y con el control de la contaminación. Unos aspectos que, a su juicio, movilizaron el voto de los jóvenes y ayudaron a los demócratas a desbancar a su rival en las elecciones de noviembre.

En cuanto a Donald Trump, no tiene dudas de que, tarde o temprano, tendrá que rendir cuentas ante la justicia por su gestión y por las cosas «ilegales» que ha hecho. Pues, «siempre ha considerado que estaba por encima de la ley y, además, ha estado mintiendo», apostilla.

Jerome Harter, de Minnesota, es director de una academia de inglés que estuvo por primera vez en España para aprender el idioma en 1999 y tres años más tarde regresó por amor y ya se quedó en Dénia. No suele hablar de política, aunque lee mucho sobre lo que pasa en su país. Quiere estar enterado pero manteniendo la distancia «por mi salud mental», bromea. Votó a distancia y, según admite, no lo hizo por Trump.

Ayer vivió la toma de posesión de Biden como un día normal de trabajo, pero consultando varias veces cómo se desarrollaba todo. Lo hizo a través de dos medios norteamericanos con posicionamientos opuestos porque «eso me permite tener una visión de ambas partes y de conjunto«. Para él fue »frustrante« toda la »información falsa« que circuló durante las elecciones y el recuento de votos, especialmente por »hay gente que realmente cree lo que dice Trump«. Por eso espera que ahora, con el nuevo ocupante del Despacho Oval, poco a poco las aguas vuelvan a la calma.