El jefe de la OMS sobrevive a un bombardeo de Israel en un aeropuerto

El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha informado este jueves de que se disponía a partir desde el Aeropuerto Internacional de Saná, la capital de Yemen, cuando las instalaciones fueron bombardeadas por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

«Cuando estábamos a punto de embarcar en nuestro vuelo desde Saná, el aeropuerto fue bombardeado. Uno de los tripulantes de nuestro avión resultó herido. Se informó de que al menos dos personas murieron en el aeropuerto», ha contado Tedros en X.

Las FDI han bombardeado el aeropuerto de Saná, y otras instalaciones de carácter civil, como centrales eléctricas, también en la capital, y algunos de los puertos clave situados en el oeste del país. Israel ha justificado el ataque sobre este tipo de infraestructuras, que ha provocado al menos tres muertos, por el uso «militar» que los hutíes hacen de ellas.

Tedros ha relatado que el bombardeo ha dañado la torre de control del aeropuerto, la sala de embarque y la pista de aterrizaje. «Tendremos que esperar a que se reparen los daños en el aeropuerto antes de poder partir. Mis colegas de la ONU, de la OMS y yo estamos a salvo», ha informado. «Nuestro más sentido pésame a las familias cuyos seres queridos perdieron la vida en el ataque», ha expresado el jefe de la OMS.

De acuerdo con la cadena yemení Masirah TV, propiedad de los hutíes, al menos tres personas han muerto y otras quince más han resultado heridas como consecuencia de los bombardeos sobre el aeropuerto. Asimismo, ha informado de otra víctima mortal durante el ataque sobre el puerto petrolífero de Ras Issa.

Tedros ha informado de que se encontraban en el aeropuerto para salir de país una vez había concluido una misión de Naciones Unidas para gestionar la liberación de algunos miembros de su personal que habían sido detenidos y tras evaluar también la situación sanitaria y humanitaria en Yemen.

Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de los hutíes, Jamal Amer, ha confirmado lo ocurrido y ha instado a Naciones Unidas y al resto de organizaciones internacionales a denunciar y condenar estos hechos, pues se trata de «una afrenta directa y una burla hacia la ONU».

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