Ascenso, una palabra proscrita en el Levante

Ascenso es una palabra proscrita en el Levante. 'Ascenso'. Cada vez que se pronuncia, alguien en el Levante nota una punzada. Aquello de que 'cada vez que dices ascenso, se muere un gatito'. Esas ocho letras duelen y mucho. Javi Calleja reconoció ayer, en su primera aparición pública tras aquel partido ante el Alavés de infausto recuerdo, que ha vivido algo semejante al duelo por la muerte de un ser querido. «Igual es frivolizar mucho, pero ha sido algo así. He tenido mi tiempo de reflexión, pero no era el mejor momento de bajarse del barco, sino de quedarse y arrimar el hombro. Estas situaciones te marcan, pero tras una pretemporada atípica estamos confiados en preparar una gran plantilla y poder hacer un gran año. Ahora empieza lo bueno», señaló el técnico. De momento, el preparador ya tiene una pieza más, pues al poco de aterrizar el equipo en Bilbao, el club anunció el fichaje del centrocampista Ángel Algobia.

El futbolista procedente del Levante llega para reforzar una zona central del equipo que para calleja quedaba coja sólo con Giorgi y Oriol Rey. Algobia se formó en las categorísa inferiores del Rayo y llegó al Getafe para reforzar el filial. En 2021 debutó en Copa y en 2023 ya tuvo minutos en Primera. En la máxima categoría ha disputado 26 encuentros y 4 en la competición del KO. Firma hasta junio de 2025 con opción a dos temporadas más.

Conocerá a sus compañeros tras el debut liguero, pues ahora ellos tienen el foco en el Amorebieta. Total. Se le preguntó pronto y se notó que Javier Calleja tenía la respuesta más que preparada. ¿El objetivo de este curso es el ascenso? «Hablar de ascenso fue mochila muy grande, de todo se aprende, estamos en una circunstancia diferente, con un equipo distinto. Vamos a ir creciendo como grupo, marcándonos como reto el siguiente partido, pero sin fijándonos retos a largo plazo», subrayó el entrenador del Levante: «El Amorebieta es un equipo que acaba de subir y que viene haciendo las cosas bien. Si no somos serios, podemos llevarnos una lección».

Después de que hablase Calleja, dos operarios estaban marcando las líneas del campo que hay frente a la sala de prensa de la ciudad deportiva. Hacían su trabajo a más de 40 grados y un viento de poniente asfixiante. Seguían adelante en su trabajo, como el Levante, el equipo, a pesar de la dura situación institucional del club.

Calleja no habla de objetivos pero tampoco rehuye de las preguntas sobre el mercado. Sabe que la plantilla está por hacer y que hasta el 31 de agosto, es lo que le toca. Por ejemplo, ante la inerpretación de la capitanía con Femenías y Vezo, dos de los nombres propios del verano. De Cárdenas aseguró que no le había elegido el grupo como uno de los portadores del brazalete. Quizás fue su único regate. Del portugués admitió que cuenta con él. «Yo trabajo pensando en que va a estar con nosotros, pero hasta el último día nunca se sabe», indicó. Sin Pubill ni Son, la gran cuestión es si el luso actuará como lateral derecho o confiará este trabajo en el joven Xavi Grande. Calleja dejó entrever que no, que los canteranos están haciendo un buen trabajo («el Levante puede estar tranquilo de lo que viene por bajo, jugadores que me van a servir para tirar de ellos», llegó a decir), pero apuntó que los chicos aún cometen fallos que deben corregir.

El entrenador expresó las necesidades del Levante en el mercado y se mostró seguro de que aún quedan refuerzos por llegar. «Yo confío en que en todas las líneas va a haber fichajes. Arriba también necesitamos incorporaciones», indicó Calleja, que avisa: «El jugador que venga debe rendir en la fase goleadora. Entiendo que en caída linea vendrá un futbolista que haga mejorar a los compañeros». También espera como agua de mayo a Dani Gómez o a Pablo Martínez, que la semana que viene empezará a trabajar sobre el césped, aunque su regreso se hará con cautela.

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