El Levante enseña su lado más inocente

El Levante recibe al Alavés, un rival directo con el que pretende mantener la ventaja de seis puntos y que necesita la victoria tras cinco jornadas sin ganar en LaLiga.

El Levante regresa a su estadio tras haber jugado sus dos primeros partidos oficiales como visitante y con el objetivo de retomar, tras caer por 2-1 en el Metropolitano hace dos semanas, las buenas sensaciones con las que cerró 2019 y que le dejaron más cerca de los puestos europeos que del descenso.

Levante UD: Aitor; Coke, Postigo, Cabaco, Toño; Radoja, Campaña, Melero, Morales, Borja Mayoral y Roger.

Alavés: Pacheco; X. Navarro, Laguardia, Ely, Duarte; Vidal, Camarasa, Manu, L. Rioja; Joselu y Lucas.

Árbitro: Guillermo Cuadra Fernández (C. Baleares)

Estadio: Ciudad de Valencia.

Hora: 13:00.

El entrenador del Levante, Paco López, tiene la baja por sanción de Nikola Vukcevic y tampoco podrá contar por lesión con Oier Olazábal, Rober Pier, Jorge Miramón ni Iván López, mientras que Rubén Vezo, ya recuperado de una lesión en la rodilla, tampoco ha entrado en la convocatoria.

Tras haber dado descanso el pasado domingo en la segunda ronda de la Copa del Rey a varios futbolistas, Paco López podría colocar a su equipo más reconocible, por lo que Cabaco y Postigo se mantendrían en el eje de la zaga y Toño García regresaría al lateral zurdo en detrimento de Carlos Clerc.

Futbolistas como Rochina o Radoja, que ni siquiera viajaron a Jaén el pasado fin de semana, volverían al equipo inicial, aunque Melero, ya recuperado de una lesión muscular, cuenta con opciones de entrar en el centro del campo junto a José Campaña y Enis Bardhi.

Mientras, José Luis Morales tiene muchas posibilidades de volver a estar entre los titulares tras su sorprendente suplencia frente el Atlético de Madrid en la primera jornada del año y formaría pareja con Roger Martí, máximo goleador del equipo con nueve goles.

El Levante y el Deportivo Alavés han protagonizado un viaje paralelo durante la primera vuelta en la que han conseguido registros similares, aunque los levantinos han conseguido más puntos por su acierto lejos de su feudo.

Los resultados fuera de casa han marcado las diferencias, pues esta es la asignatura pendiente del cuadro babazorro, que sólo ha conseguido cuatro puntos lejos de Mendizorroza, gracias a un triunfo ante el Éibar y un empate ante el Getafe.

Los vascos llegan con menos ritmo de competición a este duelo tras haber sido apeados de la Copa del Rey en la primera eliminatoria a manos del Jaén, equipo ante el que tuvo que pelear mucho el equipo levantino para pasar de ronda.

Para este encuentro, Asier Garitano mantendrá la importante baja de Tomás Pina, que dejó tocado el centro del campo alavesista, a la que se une la ausencia del ghanés Wakaso Mubarak, que cumplirá el segundo ciclo de tarjetas amarillas ante los granotas, y cederá su puesto a Pere Pons, quien actuará en el centro del campo con el capitán, Manu García.

El mercado de invierno comenzó a pulir la plantilla vitoriana, que no tendrá en sus filas al internacional Antonio Sivera, cedido al Almería, y en su lugar irá convocado el canterano Aritz Castro, hasta que el club incorpore a un nuevo guardameta para actuar como suplente del indiscutible Fernando Pacheco.

Por otro lado, podría entrar en la convocatoria el exjugador del Levante Víctor Camarasa, que regresa al conjunto vasco cedido por el Betis, como el caso de Ismael Gutiérrez, que podría ser un recurso más del técnico guipuzcoano en el centro del campo.

Puestos: Levante (11º, 26 puntos) - Alavés (15º, 20 puntos)

La clave: El Alavés llega muy necesitado y el Levante quiere aprovechar los nervios de su rival.

El dato: El equipo vitoriano es el segundo peor visitante del curso, pero en el Ciudad de Valencia ganó en una de sus dos únicas visitas en Primera División.

Levante: Aitor; Coke, Postigo, Cabaco, Toño; Radoja, Campaña, Bardhi, Rochina o Melero; Morales y Roger.

Alavés: Pacheco; Ximo, Laguardia, Ely, Duarte; Vidal, Manu García, Pere Pons, Rioja; Joselu y Lucas Pérez.

El entrenador del Levante, Paco López, aseguró este viernes que no se puede relajar a pesar de la distancia de once puntos que mantienen con la zona de descenso y aseguró que el partido del sábado ante el Alavés es «otra final» ante un rival «muy peligroso y muy fuerte».

«El partido es otra final y lo digo como tal. Tenemos que seguir generando en el Ciutat esa atmósfera especial, ese ambiente que se genera en los partidos importantes y el de mañana es uno de ellos. Necesitamos a la gente y tentemos que sentir todos que no es una temporada más, que es la del 110 aniversario y cada partido lo digo», dijo Paco López rueda de prensa.

El técnico del Levante advirtió del peligro del conjunto vitoriano, ya que «además se ha reforzado en este mercado», y calificó a sus dos delanteros como de los mejores de la categoría.

«Es un rival muy fuerte, con dos delanteros muy buenos de la categoría. Hay que hacer las cosas muy bien para tratar de ganar y el Alavés fuera de casa es muy peligroso aunque los resultados no digan eso», precisó.

Paco López no quiso referirse en profundidad al duelo de la próxima semana ante el Sevilla en la Copa del Rey, ya que destacó que en su cabeza únicamente está el encuentro ante el Alavés. «No sé si es el peor rival posible el Sevilla pero es el que hay, lo afrontaremos y a pensar a partir de mañana por la tarde y ahora cien por cien pensando en el Alavés», manifestó.

«Vamos a buscar el mejor equipo para mañana y luego buscaremos el mejor equipo del martes porque también lo queremos ganar, pero primero está el de mañana», insistió.

El entrenador del Levante, que confirmó la recuperación del portugués Rubén Vezo y explicó que Jorge Miramón todavía no está para poder jugar mañana, recalcó que espera que no haya movimientos en la plantilla en este mercado de invierno.

«La posibilidad siempre está, no la podemos evitar, pero las probabilidades, que es una cosa diferente, son pocas. Tenemos que estar preparados y no tenemos en la cabeza que nadie abandone la plantilla pero siempre con el signo de interrogación», concluyó.

El entrenador del Levante, Paco López, anunció este viernes la lista de convocados para el partido del sábado (13:00 h) ante el Alavés con la presencia del portero del filial Dani Cárdenas y sin el defensa portugués Rubén Vezo.

A pesar de que Paco López explicó en la rueda de prensa que Vezo ya se había recuperado de la lesión sufrida en diciembre en la rodilla, el entrenador valenciano le dejó fuera de la lista junto a los lesionados Oier Olazábal, Rober Pier, Jorge Miramón e Iván López y el sancionado Nikola Vukcevic.

La baja de Oier ha sido cubierta por el meta del filial Dani Cárdenas, quien ya fue convocado varias veces en el primer tramo de la campaña por la baja del meta vasco.

La lista completa es la formada por: Aitor, Cárdenas, Toño, Radoja, Duarte, Sergio León, Hernani, Roger, Bardhi, Morales, Postigo, Rochina, Cabaco, Clerc, Borja Mayoral, Melero, Coke y Campaña.

Paco López no tuvo ningún reparo en admitirlo antes del encuentro: «El partido es otra final y lo digo como tal». Al Ciutat de València llegaba el Alavés con la etiqueta de ser uno de los peores visitantes de la categoría, ya que sólo había sumado cuatro puntos lejos de Mendizorroza. El Levante disponía de una ocasión de oro para poner tierra de por medio con el conjunto vitoriano y, de paso, dar otro zarpazo a la clasificación. Los azulgrana saben perfectamente que, si mantienen el nivel y el ritmo, pueden soñar con Europa. Pero dentro de esa ilusión sobran actuaciones como la de ayer. Una de las peores de la temporada. El equipo granota dio la talla durante el primer cuarto de hora. A partir de ahí, se atascó y mostró su lado más inocente. Ese que le impidió inquietar a Fernando Pacheco y que propició los envenenados contragolpes de Lucas Pérez, Joselu y compañía. Una derrota que escuece tanto por su forma como por las circunstancias.

El Levante tenía en su mano la posibilidad de dar un golpe de autoridad. Pero los azulgrana estuvieron muy lejos de ese equipo incisivo que acostumbra a ser. Y eso que saltó al césped transmitiendo buenas sensaciones. Paco López apostó por el recuperado Melero en el centro del campo y devolvió la titularidad a Morales, por lo que Rochina y Bardhi pasaron al banquillo. Pero ayer había dos nombres propios: Roger Martí y Víctor Camarasa. El de Torrent, quien cumplía cien partidos en Primera, recibió una ovación antes del encuentro. Todo lo contrario que el centrocampista de Meliana, pitado por buena parte de la afición desde el principio.

El Levante comenzó el duelo bien ordenado y moviendo el esférico con criterio. Rondaba constantemente el área de Pacheco y era ágil en la recuperación. Los azulgrana estaban sueltos, aunque su dominio no desembocaba en ocasiones. Campaña, quien caía a banda, lo intentaba con un lanzamiento de larga distancia. Al igual que Mayoral, Cabaco y Roger. Inofensivos.

Los azulgrana, una vez más, cometieron peligrosos descuidos en el inicio de las jugadas. Lo hicieron Cabaco, Radoja y Melero. El de este último costó el primer acercamiento con peligro del Alavés. Lucas Pérez interceptó el pase del madrileño y amenazó a Aitor, aunque su disparo se marchó demasiado cruzado.

Campaña y Morales intercambiaban las bandas, ya que el sevillano apenas estaba entrando en juego. Sin embargo, la permuta no surtió efecto. Mientras tanto, el Alavés se fue estirando y el Levante se alejaba de la portería rival. El encuentro se enfrió y bajó de ritmo. El Levante perdió fluidez y los de Asier Garitano trataban de despertar: Lucas Pérez subía de revoluciones y Joselu ponía a prueba a Aitor, quien tuvo que desviar el cuero con el pecho.

Era un partido especialmente espeso, en el que ambos equipos sufrían serios problemas para encontrar espacios. El paso por vestuarios precipitó los acontecimientos. El inicio del segundo acto resultó trepidante, con intercambio de golpes entre Roger y Lucas. Melero volvió a perder el balón en una zona comprometida mientras Bardhi se preparaba para sustituirle. Minuto 55.

Un tempranero cambio que permitía a Campaña dejar la banda y volver a su hábitat natural, el centro del campo. Sin embargo, el resultado no fue el esperado. El Levante perdió solidez y el Alavés se sentía cada vez más cómodo, llegando con cierto peligro al área granota y colgando balones envenenados.

Llegó un minuto loco. El 64. Roger realizó un potente disparo en el área que impactó en el brazo de un futbolista del Alavés. Los azulgrana reclamaron penalti, pero el Alavés recuperó el balón para tejer un contragolpe de manual. Joselu asistió a Aleix Vidal, quien batió a Aitor. El VAR revisó la jugada anterior y determinó que no había manos. 0-1.

Justo después, Hernani relevó a Morales. El extremo portugués entró con la misión de revolucionar el partido. Es un experto en esa materia. Para bien y para mal. Paco López quería aprovechar su desequilibrio. Y el luso tuvo influencia desde que pisó el césped. Recibió un perfecto pase en profundidad de Roger y encaró a Pacheco, pero Laguardia llegó a tiempo para desviar su disparo.

El partido se abrió por completo, ya que el Levante corrió riesgos en busca del empate. Se volcó y eso tenía consecuencias. Cada contraataque del Alavés olía a 0-2. Sin contundencia atrás, emergió, como es habitual, la figura de Aitor. Mantuvo la esperanza con paradas providenciales. Salvó el segundo tanto del conjunto vitoriano hasta en cuatro ocasiones. Lucas Pérez tendrá pesadillas con el guipuzcoano, quien le ganó dos veces en el mano a mano.

El partido estaba roto y Hernani se sentía en su salsa. Tras una bicicleta, fabricó un espléndido centro para Sergio León. Su testarazo se fue al lateral de la red. El luso probó fortuna con disparos demasiado lejanos. Es un futbolista anárquico. Sin rigor táctico. Impulsivo. De sangre caliente. Algo que le cuesta reprimendas de sus propios compañeros. Ayer, definitivamente, no fue el día.