Dwamena, en manos de los cardiólogos

Raphael Dwamena no tira la toalla. Los problemas de corazón le han vuelto a dejar fuera de juego, como ocurrió hace dos años, pero en absoluto se resigna. El delantero del Levante, cedido en el Zaragoza durante la presente temporada, sufre una patología que le ha obligado a parar durante un tiempo indefinido. Sus pulsaciones se dispararon de una manera alarmante en el último encuentro. Todas las partes apuestan por la prudencia y se mantienen a la espera de nuevas pruebas médicas para determinar si el ghanés podrá recuperarse para la práctica del fútbol profesional. El atacante, de 24 años, está afectado por el duro contratiempo, aunque en absoluto baja los brazos. Con la esperanza de regresar a los terrenos de juego, va a consultar a más especialistas durante los próximos días.

El pasado miércoles, el Zaragoza comunicó que un «problema de salud» deja apartado a Dwamena «de momento». Tuvo que ser sustituido durante el partido contra el Cádiz en el minuto 70, ya que se sentía mareado. El aparato que lleva incorporado y que mide su frecuencia cardíaca reveló un ritmo preocupante. En la jornada anterior, frente al Málaga, había notado malestar, aunque entendió que podía estar relacionado con un virus que había recorrido el vestuario. No era así.

Dwamena se desplazó a Barcelona para visitar a un experto en la materia. De momento, hay incertidumbre y cautela. Toca esperar. Tanto el entorno del delantero como el Levante y el Zaragoza se centran en arroparle y ponerle todas las facilidades posibles para que se recupere. El ghanés va a solicitar más pruebas y opiniones. Viajará a Zúrich para consultar al especialista que ya le atendió en 2017. Cabe recordar que el Brighton descartó su fichaje al detectar un problema cardíaco durante el reconocimiento médico.

El Levante y el Zaragoza, en cambio, consideraron que el futbolista te encontraba en perfectas condiciones para competir. «Hace un año en Inglaterra me dijeron que no iba a jugar más a fútbol y hoy estoy aquí», afirmó Dwamena durante su presentación como granota en 2018.

El africano va a consultar a su cardiólogo de confianza en Zúrich y, posteriormente, regresará a Barcelona para profundizar en el diagnóstico. Precisamente, ayer estuvo en Valencia para recoger la tarjeta de residencia y aprovechó para acudir a las oficinas de Orriols. El club azulgrana y la entidad maña aguardan los resultados definitivos antes de tomar decisiones sobre su acuerdo.