Emilio Nadal: «Deseo que la exposición en L'ETNO sea el germen del futuro museo del Levante»

–Una Navidad intensa...

–Es una Navidad muy azulgrana porque hay muchos eventos. La exposición es un trabajo conjunto entre el área de patrimonio histórico del Levante, L'ETNO y Diputación y para nosotros es súper importante poder mostrar esta documentación. En el club estamos encantados por todas las facilidades que nos han dado y por la apuesta tan fuerte que tanto L'ETNO como Diputación han hecho por nosotros. Como se va a extender hasta junio, va ligado a una serie de actividades. Y una fue la presentación de dos nuevos libros sobre la historia del Levante. Somos un club con mucha literatura y ya empieza a ser difícil sorprender con algo, pero yo creo que vamos a sorprender. El libro de Felip Bens y Ortifus es bestial. Y luego tenemos otro libro que recoge 113 iconos entre jugadores, jugadores y algún entrenador.

–¿Qué pueden encontrar los granotas en la exposición?

–La afición del Levante va a poder descubrir documentación que no conocía y el aficionado que no es del Levante va a conocer un club diferente, con un nacimiento un poco accidental porque fueron dos clubes que después de la guerra se tienen que fusionar.

–¿Cuáles son las piezas más curiosas?

–Hay bastantes. Hemos conseguido recuperar la imagen de Sanchis, que es el fundador del Gimnástico. A través de su familia, sobre todo su nieta Eugenia, han puesto a nuestro servicio un montón de fotografías que muestran una visión más íntima de él. Y hay cosas muy significativas como un banderín de 1927 del Levante FC. Hay piezas bonitas de ver, como el balón de Vall del ascenso de 1963. Y unas botas suyas. Y hay mucha documentación de los años 50, correspondencia interna de los jugadores. Hay una carta muy graciosa de Camarasa, capitán del ascenso de 1963, que está pidiendo una amnistía en cuanto a multas a final de temporada para que la gente se involucre aún más porque el ascenso estaba cerca.

–¿Esta muestra se puede considerar un aperitivo del museo que está por llegar en el Ciutat?

–Mi deseo es que esto sea el germen de un futuro museo. En el club sí que se valora la perspectiva del museo. Me gustaría que esto fuera el inicio. Entiendo que nosotros ahora mismo en el campo no tenemos espacio para hacer un museo, pero hay un proyecto de reforma de la zona de los bajos y ahí sí hay una idea de museo. Es perfecto para apostar por el museo.

–¿La exposición recorre la historia hasta el primer ascenso?

–L'ETNO nos brinda una posibilidad súper importante porque estamos hablando de un museo que está luchando por ser considerado el mejor museo europeo de 2022. El acceso se realiza por una recreación del arco del campo de Vallejo. Centramos el tiro en los orígenes y acabamos en 1963, pero la exposición se cierra con la proyección de un documental del Levante del siglo XXI en el que mostramos es un equipo pionero en el fútbol inclusivo, un equipo que apostó hace 20 años por el fútbol femenino, un club que tiene una sección de fútbol sala en la élite... Queríamos mostrar que el Levante acaba siendo un club moderno y que hay que conocer.

–Uno de los pilares de la exposición es la Copa de la República. ¿En qué punto están las gestiones para su reconocimiento?

–Hay un espacio dedicado a la guerra civil. Está la copa y una réplica de las camisetas de la final que enfrentó al Levante y al Valencia. Quico Catalán –presidente del Levante– se reunió en Madrid con el Secretario de Estado de Memoria Democrática –Fernando Martínez López–, y lo que trasladó fue todo bastante positivo, pero todavía no se ha concretado en nada. Estamos a la espera. Al día siguiente de tramitarse la Ley de Memoria Democrática, el Levante ya mandó un requerimiento argumentando la reivindicación de esa copa. Lo que estamos esperando es que acabemos de una vez con esta historia.

–¿La idea es, junto al CSD, insten a la Federación Española a dar oficialidad al trofeo?

–Todo esto es un tema de voluntades. El reconocimiento está en manos de la Federación. Y la voluntad es entender que en aquella España republicana se intentó jugar a fútbol como se venía jugando en los años anteriores. Evidentemente no se podía jugar en las mismas condiciones, hay una guerra y España está dividida en dos. Yo creo que la Secretaría de Estado de Memoria Democrática sí que puede forzar un poco a la Federación a que reconozcan este título. Por otra parte, hace unos meses la Federación planteó que lo iba a dejar en manos del CSD. A lo mejor por ahí la vía puede ser más sencilla.

–¿El reconocimiento sería una recompensa a nivel personal para usted? Lleva más de 20 años investigando.

–Empecé en 1998. Esta historia me la contó Ramón Victoria, que me puso sobre la pista. Yo no tenía ni idea. Al principio estaba prácticamente solo y luego se ha ido sumando mucha gente. Para mí ha sido importante porque es más fácil cuanto tienes posibilidad de compartir todo esto. Profesionalmente la Copa me va a marcar, pero ya no es una cuestión personal, sino una cuestión de justicia con el club y con aquellos jugadores que en muchos casos defendían el escudo del Levante y luego se iban al frente e incluso alguno falleció.