La expedición del Levante realizó ayer su particular mudanza. Esa que le llevó a La Nucía. Su casa de alquiler hasta mediados de julio. Los de Paco López terminarán allí, concretamente en el Estadi Olímpic Camilo Cano, su temporada como locales. El recinto acogerá seis partidos cruciales para culminar la permanencia en la máxima categoría o incluso soñar con algo más. Con tal de adaptarse a su circunstancial hogar, la plantilla se subió al autobús y recorrió los 140 kilómetros que separan el Ciutat de València de su 'nuevo' campo. Y ya por la tarde, los azulgrana tuvieron su primera toma de contacto con el terreno de juego, que se encuentra en perfecta condiciones. Permanecerán en la Marina Baixa hasta mañana para entrenarse y amoldarse, sobre todo, al césped. El próximo lunes, contra el Sevilla, se acabarán las pruebas y será el turno de la competición.
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Cerca de 50 personas forman la expedición azulgrana que se desplazó ayer a La Nucía. Y es que, al margen de los integrantes de la primera plantilla, Paco López citó a ocho canteranos: Dani Cárdenas, Joan Monterde, Pablo Martínez, Arturo Molina, Rubén García, Álex Blesa, Pablo Picón y Giorgi Kochorashvili. El técnico del Levante cuenta con todos sus futbolistas salvo el lesionado de larga duración Iván López. El lateral derecho, quien quedará libre este verano, continúa recuperándose de sus problemas de rodilla.
Los granotas pudieron explorar el terreno. El Camilo Cano, inaugurado el pasado mes de agosto, es un estadio coqueto. Moderno. Cuenta con unos vestuarios amplios, un gimnasio, un césped de alta calidad, un potente sistema de alumbrado y sonido y una iluminación interior que contempla varios programas para adornar el edificio. Así, con motivo de los encuentros del Levante, la Tribuna se podrá encender con los colores azulgrana cuando el equipo llegue al campo o marque un gol. Se trata de un proyecto ambicioso y posee un gran margen para ampliar las gradas, que actualmente tienen 2.000 personas de capacidad.
Características que los futbolistas pudieron comprobar durante el entrenamiento de ayer. Los de Paco López volverán a ejercitarse hoy por la tarde, mientras que mañana lo harán a primera hora. Posteriormente, regresarán a Valencia, ya que el jueves realizarán en la ciudad deportiva de Buñol la última sesión preparatoria para el derbi.
El domingo, el Levante volverá a La Nucía para entrenar y concentrarse de cara al partido frente al Sevilla. Será el esperado debut del Estadi Olímpic Camilo Cano en Primera. El conjunto granota ya ha elegido el hotel que se convertirá en su cuartel general cada vez que se desplace a la Marina Baixa durante lo que resta de temporada. Las instalaciones donde se hospeda desde ayer serán las mismas en las que lo hará con motivo de los partidos como local. Se trata del Meliá Villaitana, que se encuentra en el municipio de Benidorm y a menos de ocho kilómetros del campo.
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El hotel, que aún tiene sus puertas cerradas para los turistas, ha aceptado al Levante como primer y por ahora único cliente desde que estalló la crisis del coronavirus. El recinto dispone de una zona exclusiva, que es la elegida por los azulgrana para hospedarse. Están siguiendo rigurosamente las medidas de prevención y emplean habitaciones individuales. Ayer, la expedición se limitaba a futbolistas, técnicos, utilleros y miembros del departamento de comunicación. No había viajado ningún directivo.
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