Miñambres acorta su círculo de confianza

Si bien los técnicos hoy en día tienen la posibilidad de hacer hasta cinco sustituciones, Felipe optó por utilizar sólo dos. Fabrício y Bouldini fueron los únicos revulsvivos del conjunto granota. El resto de los convocados que no estuvieron en el once inicial, se quedaron sin pisar el césped. Llamativo cuanto menos, sobre todo por el contexto del encuentro, de idas y venidas y con un cansancio físico apreciable en varios futbolistas. Escenario ideal, teóricamente, para refrescar piernas desde el banco para buscar algo diferente. No fue así.

Los Alejandro Cantero, Oriol Rey, Róber Ibáñez, Iván Romero, Álex Valle, Ander Capa y Sergio Postigo viajaron a Santander para tener un asiento en primera fila de El Sardinero y poco más. Miñambres ha encontrado la combinación de nombres con la que se encuentra cómodo y con la que cree que el equipo muestra su mejor versión, y si no es necesario por una emergencia —como la entrada del canterano Jorge Cabello por el enfermo Nikola Maras—, no se cambia. Porque el Levante afronta ahora unas últimas seis jornadas importantísimas donde sólo los mejores van a tener la oportunidad. Ya no hay tiempo de pruebas y experimentos. Jugarán los que están en buen momento y poco más.

Postigo lleva siete jornadas sin participar, cinco lesionado y en las dos últimas ya en la convocatoria pero sin minutos. Capa, completamente defenestrado, sólo jugó la primera parte ante el Andorra, quedándose apartado en ocho compromisos. Oriol Rey entró en los últimos diez minutos ante el Valladolid y desde entonces, tres partidos sin jugar. Cantero, un minuto también ante el Pucela y tres encuentros sin salir. Róber Ibáñez, después de tres titularidades —72, 68 y 60 minutos en cada una—, no apareció por El Sardinero. Romero no ha tocado césped en los dos últimos partidos, mientras que Álex Valle tuvo un minuto en Valladolid y 11 ante el Amorebieta. Puras demostraciones de que Miñambres no tiene confianza en dichos futbolistas y que, a la espera de recuperar a Algobia y que Maras esté disponible, 'la rotación' del Levante la componen menos de 15 jugadores prácticamente intocables e inamovibles.

En la próxima jornada ante el Cartagena, partido crucial en el Ciutat en el que el Levante ya sí que está obligado a ganar si quiere seguir aspirando a entrar en el play-off, difícil será ver a alguno de estos futbolistas granotas más allá de algún cambio para perder tiempo si el resultado es favorable. Con el partido abierto, Miñambres ha encontrado a sus hombres de confianza, que si el físico les aguanta, deberán afrontar el grueso de los minutos para liderar a un equipo que muestra una solidez defensiva aceptable, pero que sigue teniendo una pólvora mojada arriba con serias dificultades para marcar goles. La suplencia de Fabrício, interpretable también como un toque de atención al brasileño, que sigue sin marcar.