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José Molins
Domingo, 8 de febrero 2015, 23:01
Cada victoria vale oro para el Levante. Especialmente esta temporada, con una preocupante escasez de alegrías. Tan sólo cuatro triunfos en 22 partidos, lo que ha motivado multitud de cambios en cada alineación. Pero hay dos jugadores básicos tanto para Alcaraz como para Mendilibar. Y ambos se llaman David. Sólo Barral y Navarro han sido titulares en todos los triunfos granotas en esta Liga. Dos pilares básicos para el equipo tanto en defensa como en ataque, de los que no se puede prescindir para seguir sumando más puntos para escapar del descenso.
El sábado ante el Málaga volvieron a ser fundamentales, sobre todo el delantero, con un triplete para la historia, con el que sucede a Cristian Riganó como único levantinista en anotarlo en Primera división. Tras el encuentro no se separaba del balón firmado por todos sus compañeros y así se marchó a casa, con el cuero amarillo bajo el brazo y una sonrisa de satisfacción.
Los cuatro goles de Barral han significado dos victorias para el equipo, ya que también marcó frente al Almería. Aún así, resulta un bagaje muy pobre para el delantero centro del conjunto azulgrana. Por su parte, el central de Puerto de Sagunto cometió un error de bulto que costó el gol de los blanquiazules, pero el triunfo posterior con la remontada granota minimiza ese fallo del valenciano, que volvía al once después de dos partidos de sanción por su expulsión en Elche.
Con Navarro y Barral en el once inicial el Levante ha doblegado al Málaga, Almería, Valencia y Granada, las únicas veces que los granotas se han llevado los tres puntos en disputa. Aunque hay otros dos jugadores más que también han participado en esos cuatro felices encuentros. Se trata de José Luis Morales y Rubén García, pero ninguno de los canteranos han sido titulares siempre. El madrileño empezó desde el banquillo en el derbi y frente a los almerienses, mientras que el de Xàtiva fue suplente el pasado sábado, y cuando entró al campo, el encuentro estaba ya encarrilado.
Lo que resulta evidente es que el equipo ha dado un salto de intensidad, se atreve a jugar más en el campo contrario y por ese camino en el vestuario esperan que lleguen más victorias que contribuyan a la salvación. Por el momento, el triunfo número cien en la historia en la máxima categoría ha servido para que el conjunto granota no sólo abandone el puesto de colista, sino que salga del descenso, gracias también a la derrota ayer del Córdoba ante el Almería. Y a expensas, eso sí, del Elche-Rayo de esta noche, ya que si ganan los ilicitanos, el equipo de Alcaraz volverá a ocupar la zona de peligro.
Tanto Barral como Navarro se han encontrado con sendos socios perfectos gracias al mercado de invierno. Kalu Uche y Ramis demostraron en esta pasada jornada que se complementan de maravilla con sus compañeros. Los movimientos del nigeriano aportan muchos espacios que el gaditano aprovecha, y juntos crean más llegadas y ocasiones peligrosas que hasta ahora. Incluso parece entenderse mejor que con Víctor Casadesús, de quien es amigo personal fuera del campo. Y en cuanto al balear, su pareja con el valenciano da la impresión que va a ser la definitiva hasta el final de la temporada. Ya se conocen de su etapa en el Mallorca y ambos reconocieron tras el encuentro que se entendieron a la perfección.
Aunque la del próximo domingo en el Camp Nou es una gran prueba de fuego. No llega en buen momento la visita al Barcelona, justo cuando el Levante acaba de conseguir la confianza que había perdido tras una racha de nueve encuentros sin ganar, pero si de ahí el equipo, con la defensa al frente, sale reforzado, Alcaraz tendrá mucho adelantado de cara al futuro.
Llama la atención la cantidad de cambios que está haciendo el técnico en cada alineación, y sobre todo, que jugadores completamente asentados en el once, pasan a quedarse fuera de la convocatoria a la jornada siguiente, mientras que otros que apenas contaban, de pronto recuperan su peso en el equipo. El caso de Nikos y Toño es un buen ejemplo. El valenciano volvió a la titularidad el sábado tras no jugar desde 2014 y haberse quedado en la grada en algunos encuentros, mientras que el griego, titular habitual en los primeros partidos de Alcaraz, no está entrando en la lista. Incluso Morales ha actuado de lateral izquierdo por delante de ambos.
Camarasa también ha sufrido una etapa de quedar al margen del equipo e incluso se barajó su salida en el mercado de invierno, pero ahora se ha asentado en el once gracias a sus buenas actuaciones. Lo tendrá difícil José Mari para debutar como titular si el de Meliana sigue a este nivel y Diop vuelve a ser el de antes de ir a la Copa de África. Y precisamente el mercado de enero ha provocado que ahora Alcaraz tenga que hacer ocho descartes cada jornada, al tener a 25 jugadores de la primera plantilla más dos canteranos. Tras irse Rodas, Gavilán o Víctor Pérez, ahora habrá otros descartes habituales. El Adoua, Pedro López, Sissoko y Martins, por lo visto hasta ahora, tienen muchas papeletas de ver muchos partidos desde la grada.
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