Alberto Martínez de la Calle
Martes, 11 de agosto 2015, 22:12
Hay un nudo en la planificación deportiva. Después de que el Levante haya pisado el acelerador para apuntalar la defensa con Trujillo y Feddal, los dirigentes azulgrana se han propuesto reforzar la medular. El gran objetivo se llama Thomas Partey, cuya llegada se presenta complicada. El Atlético de Madrid se reunió ayer con el mediocentro ghanés y le transmitió que, de momento, entra en los planes de Simeone. En cualquier caso, el club de Orriols está atado de manos, ya que no puede inscribir a ningún otro futbolista al tener las 25 fichas ocupadas. Urge aligerar la plantilla. Un proceso que se ha atascado.
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El pasado 16 julio se produjo la última salida del Levante. Fue la de Víctor Pérez, quien se rescindió su contrato para recalar en el Córdoba. Pero hay, como mínimo, seis jugadores más que no entran en los planes del entrenador azulgrana, Lucas Alcaraz.
Jesús Fernández, Javi Jiménez, Nikos Karampelas, Nabil El Zhar, Jordi Xumetra y Rafael Martins ya saben de primera mano que van a desempeñar un papel discretísimo dentro del equipo. Sin embargo, por ahora, existe escasa predisposición a abandonar Orriols por parte de los descartes.
La operación salida se ha bloqueado. Quien contempla más alternativas de futuro es Rafael. El brasileño sabe que parte como quinto delantero por detrás de Ghilas, Deyverson, Casadesús y Roger. Y no desea pasar un año en blanco como el anterior. De esta forma, está peinando en mercado en busca de un acomodo interesante. Todavía no ha recibido ofertas formales, pero podrían materializarse en los próximos días.
Está en la agendas de clubes españoles, portugueses, turcos y rusos. Si llega una propuesta atractiva, Rafael hará las maletas. Eso sí, en principio se marcharía en calidad de cedido. El contrato del brasileño expira en 2017 y el Levante no pretende romperlo, ya que confía en que recuperará su mejor versión. Sólo se plantearía su traspaso por una jugosa cifra.
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Otra pieza sin encajar en el puzzle de Alcaraz es Xumetra. El extremo, al igual que Rafael, no ha gozado de ningún minuto durante los tres amistosos disputados en Holanda ni en la presentación oficial del equipo. Una señal nítida.
«El tema de las salidas está parado. Hay un problema que siempre es bienvenido. Es muy difícil porque los jugadores están tan a gusto en el Levante que nadie quiere salir. Estamos trabajando en ello. Los jugadores que no van a tener muchos minutos al final se van a dar cuenta de que este año va a ser importante para ellos y tienen que jugar. Espero y deseo que lleguemos a un buen resultado», admitió el director deportivo del Levante, Manolo Salvador, el pasado lunes.
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En esta tesitura se encuentra Xumetra. El gerundense, pese a las pocas oportunidades de las que disfruta, se siente cómodo en Orriols. No está analizando posibilidades de futuro, aunque tampoco cierra ninguna puerta mientras el mercado permanezca abierto.
En una posición semejante a Xumetra están Javi Jiménez, Jesús Fernández, Nikos y El Zhar. A los cinco le queda un año de contrato, por lo que el Levante les facilitaría la carta de libertad. Si no hallasen acomodo en los próximos días, el club azulgrana se vería obligado a negociar la rescisión de sus contratos.
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Otros futbolistas que poseen un rol secundario son Pedro López y Jason. El lateral valenciano, aunque arrancó como un claro candidato a salir, confía en quedarse al ganar presencia. Mientras, el joven extremo sólo piensa en hacerse hueco en el Levante y no se plantea una cesión.
La idea de Alcaraz consiste en configurar una plantilla reducida, de 22 futbolistas. Y el Levante aún debe realizar, como mínimo, dos incorporaciones. La prioridad es Thomas Partey. El Atlético comunicó ayer al mediocentro ghanés que, en principio, no va a salir cedido.
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De todas formas, Partey podría cambiar de aires si el club rojiblanco acaba haciéndose con los servicios de Thiago Motta, el anhelo de Simeone. El PSG se resiste a desprender del futbolista brasileño y la negociación se ha enquistado.
El Levante también desea reforzarse con un jugador de banda y, dependiendo de la bajas que se produzcan, un lateral y un portero. Uno de los hombres que abandonó Orriols este verano, Pape Diop, estaba ayer en Barcelona preparado para cerrar su fichaje por el Espanyol, pero en el último momento la entidad catalán ha aparcado la operación.
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