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ALBERTO MARTÍNEZ
Miércoles, 9 de noviembre 2016, 22:47
La operación para incorporar a Abraham Minero al Levante se cerró con bastantes aristas. El club azulgrana anunció la cesión del defensa para esta temporada con opción a otro año, aunque el vínculo del futbolista con el Zaragoza expira el 30 de junio de 2018. El contrato está plagado de cláusulas. Sin embargo, al margen de los distintos escenarios contemplados sobre el papel, la entidad de Orriols tiene amarrado al lateral zurdo. Si la cúpula granota sigue confiando en el catalán, tendrá garantizada su continuidad la próxima campaña.
Abraham Minero ha sido relegado de la titularidad en las dos última jornadas. La competencia es dura, ya que lucha por un puesto con Toño García. En cualquier caso, el de Granollers, con capacidad para desempeñar labores de extremo, ha completado actuaciones convincentes. Ha vuelto a disfrutar del protagonismo que perdió en el Zaragoza.
El futbolista, de 30 años, pasó por el filial del Barcelona y posee experiencia en Primera y Segunda. El director deportivo del Levante, Tito, apostó por Minero para apuntar el flanco izquierdo de la zaga. Y el club quiso cubrirse las espaldas para poder contar con sus servicios la venidera temporada. Aunque todas las partes firmaron un contrato trufado de cláusulas, los dirigentes azulgrana tienen una posición preeminente de cara al futuro.
El pasado 7 de julio, el Levante comunicó la llegada de Minero como cedido, dejando abierta la posibilidad de prolongar el préstamo una temporada más. En el documento, figuran varios condicionantes relacionados con el futuro del lateral zurdo en Orriols, como el ascenso a Primera División o la disputa de un al menos 25 partidos a lo largo de este curso. Incluso aparece el factor de en qué categoría militará el Zaragoza la próxima campaña.
Unos objetivos y unas hipótesis que quedarán en un segundo plano si, a final de temporada, el Levante apuesta por Minero. En ese caso, más allá de que se haya producido o no el esperado ascenso y de los encuentros que haya jugado el catalán, Tito tendrá garantizada su continuidad en el equipo. Entonces, el de Granollers se despediría definitivamente del Zaragoza, donde tiene contrato hasta 2018. El cuadro maño se erige en otro de los aspirantes a subir a Primera, aunque su decepcionante inicio liguero desembocó en el despido de Luis Milla y el aterrizaje de Raúl Agné.
De esta forma, el Levante ha atado a Minero de cara a la temporada 2017-18. Podrá conservarlo en la plantilla siempre que su rendimiento resulte satisfactorio, independientemente de los números individuales y colectivos. El futbolista, quien la pasada campaña sólo pudo disfrutar de 826 minutos a causa de una fractura en el hueso del talón, llegó al Zaragoza en 2011.
Ahora, en el Levante, Minero trata de recuperar la titularidad que ha perdido. Ya ha participado en 11 compromisos de Liga, nueve de ellos como titular. Con cuatro tarjetas amarillas en su expediente, está apercibido de sanción.
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