Orriols sufre la revancha

El Levante, el único equipo que ha sido capaz de llevarse un botín del Johan Cruyff, no pudo cuestionar nuevamente la hegemonía del Barça. Era una cita atractiva. Por eso, el club granota eligió el Ciutat de València como escenario y abrió todas sus gradas para dar cabida a los 10.834 espectadores que asistieron finalmente. Las de Sánchez Vera afrontaban el desafío con la tranquilidad de saber que la tercera posición, esa que otorga el último billete para la Champions, no peligraba después del pinchazo del Madrid CFF, que unas horas antes había caído por un contundente 3-0 en Granada.

El Barcelona aplastó al Levante a pesar de que Giráldez apostó por el plan B. Hasta nueve rotaciones introdujo después del partido de Champions League contra el Brann del pasado jueves. Sólo repitieron en el once Irene Paredes y Alexia Putellas. Cambió incluso la portería, situando bajo palos a una vieja conocida como la alicantina Sandra Paños.

Apenas cuatro minutos resistió el Levante. El tiempo que tardó Salma Paralluelo en arrancar con la misma potencia que exhibía cuando se alzaba como una de las grandes promesas del mundo del atletismo. Después de años compaginando ambos deportes, la zaragozana se decantó por el fútbol. Y con la camiseta del Barcelona saborea la gloria rodeada de las mejores jugadoras del planeta. En el Ciutat fue la referencia ofensiva del Barça e hizo sufrir a la zaga granota. En su primera intervención, rompió líneas con velocidad y se sacó de la chistera un sutil pase con el exterior del pie para que Bruna empujara el balón a portería vacía.

El Levante se encomendaba a los contragolpes frente al dominio del Barça en el centro del campo. Sin embargo, no llegaban a inquietar a Paños. La principal arma granota, Alba Redondo, trató de aprovechar los espacios sin éxito. Demasiado sola. Tras una cabalgada de casi 40 metros, el campo se le hizo largo y fue cazada por Vicky López. Precisamente, la centrocampista madrileña mandó por el cielo un balón teledirigido que aterrizó sobre Paralluelo, quien se había desmarcado a la perfección y batió a placer a Andrea Tarazona.

0-2 a la media hora de juego. La guardameta levantinista se hizo gigante para evitar que el partido quedara sentenciado antes del descanso. Pero el segundo acto arrancó con un golpe del que ya no se pudieron levantar las granotas. Bruna, con un latigazo desde el vértice del área, amplió distancias. Paralluelo y Matina completaron la goleada. El conjunto de Sánchez Vera estuvo lejos de repetir la proeza.