Que no pare la fiesta en el Ciutat

No hay tregua este año, ni para los pocos que parecen buenos ni para los muchos que no lo tienen nada claro. Ayer finalizaba la primera vuelta de campeonato y casi sin tiempo para poder degustar con cierta calma la clasificación, debatir sobre el balance y meditar el tirón final de Liga, el Levante estrena esta misma noche la segunda ronda, esa que irremediablemente tiene que instalar a los de Paco López en las posiciones cómodas. Repetir el inicio de Liga parece hoy por hoy prácticamente imposible. Se hace difícil imaginar que este equipo, que se ha ajustado como un guante de látex al Ciutat, sea capaz de perder cuatro de los cinco partidos disputados como hizo al principio.

Al Levante le ha cambiado la cara. Sin Campaña, el grupo sigue dando pasos importantes. Prueba de ello son las cuatro victorias consecutivas en casa. Llega el Valladolid para someter a los azulgrana a una nueva prueba antes de que estos pasen por Valdebebas donde les esperará un Real Madrid descolocado tras lo de Alcoi. Ya se sabe que hay dos 'Levantes'. El inspirado de casa y el facilón fuera. Hasta Paco López entiende la desesperación que el aficionado siente con ese contraste de sensaciones. «Está siendo una Liga muy rara. Claro que queremos ganar fuera. Pero es muy difícil hacer también lo que estamos haciendo en el Ciutat, que es sacar muchos puntos en nuestro estadio. Intentaremos buscar ese equilibrio. El equipo tiene la misma ambición fuera que en casa. No escatimamos fuera, no cambiamos la idea… No es fácil explicarlo», decía ayer.

En Pucela arrancó un punto el cuadro granota (1-1) en lo que fue el quinto empate consecutivo en esa fase de la primera vuelta. Desde entonces, las cosas han mejorado sustancialmente. Ya se suma de tres en tres y los debates se han alejado de la figura de Paco López. Ahora se está más pendiente de la renovación de Morales, de la operación de Campaña, de los goles que sigue marcando Roger, de la probable vuelta de Vezo y de la casi puesta a punto de Bardhi. Vukcevic ya ha superado el Covid pero está renqueante y la convocatoria es la misma que el último partido.

El panorama se presenta de cara para los azulgrana. Justo lo contrario que para el equipo que prepara Sergio, atacado por las bajas por unas cosas u otras. «Ha adquirido fortaleza en su feudo y cuenta con muchas virtudes, entre ellas, que el míster y los jugadores vayan a uno», decía el técnico pucelano en referencia a la situación azulgrana.