Pepelu, la perla que ayuda a su padre con la fontanería

Pepelu se estrenó en la máxima categoría del fútbol español el pasado 11 de septiembre y, desde entonces, ha disfrutado de cuatro titularidades. Tras la destitución de Paco López, el prometedor centrocampista aspira a hacerse un sitio en el esquema de Pereira. José Luis, el padre del canterano, se muestra optimista: «Le veo animado y con capacidad de jugar. Y él también se lo cree. Se lo va a ganar. Le costará porque son 25 o 27, pero las cosas no son cómo empiezan, sino cómo acaban. Está trabajando para intentar jugar. No tiene malos rollos. No es de los que se enfadan si no juegan. Eso no vale para nada. No es nada positivo. Positivo es, si no te ponen, seguir trabajando. Es lo único que hablamos en casa. Él intenta mejorar en todo».

El pasado verano, José Luis tuvo la colaboración especial de su hijo. «Soy autónomo. Soy fontanero. Le dije: 'Me tienes que ayudar porque yo trabajo solo'. Y en sus vacaciones me ayudó. Me echa una mano. Cuando estoy en un sótano y meto la mano donde no es agradable, le digo: '¿Prefieres trabajar conmigo o el fútbol?'. Y me responde: 'No, papá. El fútbol'«, relata el padre de Pepelu.

El mediocentro destaca por su sencillez. «Es una persona independiente. Es un chico bastante sensato, serio, cumplidor, que le gusta el fútbol y que se cuida. En la vida hoy estás aquí y mañana dejas de estar. Es un buen chico, no se mete en jaleos«, cuenta José Luis. Recuerda los primeros contactos con el Levante.

David Salavert, entonces director de la escuela del Levante, descubrió el potencial de Pepelu. «Vino a buscarnos. Habló conmigo y fue muy claro. Y me decanté por él. Después de eso vino alguien del Valencia y le dije que no, que ya había dado mi palabra. Y tanto mi padre como yo somos del Valencia de toda la vida«, cuenta entre risas José Luis, quien anteriormente había acudido con su hijo »dos o tres veces« a la ciudad deportiva de Paterna con motivo de entrenamientos de prueba. El Hércules también llamó a su puerta.

«Me decanté por el Levante porque David fue de cara. Se portó fenomenal y me puso todas las facilidades del mundo», explica José Luis. De esta forma, Pepelu accedió a la residencia de la ciudad deportiva de Buñol. Actualmente, Salavert forma parte de la agencia Wasserman, que representa al joven dianense. Ambos mantienen una estrecha relación.

Salavert rememora el momento en que se quedó fascinado con Pepelu. «Me había llegado por varios lados que había un chico que lo hacía bien y que jugaba en el Dénia infantil. Un sábado por la tarde fui a verle. Era invierno y hacía un frío de narices. Estaba viendo el partido a ras de campo y, a los cinco minutos de verle jugar, ya estaba preguntando dónde estaba el padre para ir a hablar con él. Le dije: 'Creo que tu hijo tiene un potencial impresionante y me encanta'. A partir de ahí iniciamos todo un proceso hasta que conseguimos incorporarlo al club de cara a la temporada siguiente», comenta.

Salavert detectó su talento inmediatamente: «Vi algo muy diferente. Vi un jugador infantil jugando con cadetes que indiscutiblemente estaba por encima de los jugadores de su edad y en ese partido estaba destacando con cadetes. Me transmitió madurez, saber estar en el campo, una muy buena toma de decisiones, un muy buen nivel técnico, muy buen físico... Lo vi yo. Pero creo que llevas a 300 y los 300 habrían dicho que ese tío es muy bueno». Y avisa: «Su capacidad de mejora no tiene límites. Es ilimitada. Tiene capacidad para ser un grandísimo futbolista en Primera División. Tengo cero dudas. Si tengo que hablar con el corazón, a lo mejor lo vemos en la selección española en un futuro«.

El ahora representante ensalza la profesionalidad y la inteligencia de Pepelu: «Tiene una cabeza increíble para entender el juego». El dianense acaba contrato el 30 de junio y su renovación continúa en el aire. Sin embargo, José Luis espera ver triunfar a su hijo en Orriols: «Está a gusto. Siempre ha querido jugar en el Levante. Si le dan confianza, alguno se va a llevar una sorpresa».