En un mercado invernal atípico, en el que el Levante estaba maniatado y no tenía previsto reforzarse, se precipitaron los acontecimientos a falta de dos días para expirar el plazo. La venta de Oier Olazabal y Erick Cabaco desencadenó la repesca de Koke Vegas y el fichaje de Bruno González. Este último se ha comprometido con la entidad azulgrana hasta el 30 de junio, aunque contempla la opción de seguir. En marzo se producirá una reunión clave para aclarar su futuro.El Levante, de esta forma, sigue disponiendo de cuatro centrales, sin contar a un Róber Pier que ultima la recuperación de su grave lesión de rodilla. Bruno González competirá por el puesto con Postigo, Vezo y Duarte. El zaguero canario no entraba en los planes del Getafe, donde tenía contrato hasta final de temporada. El pasado viernes se desvinculó de la entidad azulona para buscar minutos en el Ciutat de València.No lo tendrá fácil Bruno, ya que el técnico del Levante, Paco López, apuesta claramente por Postigo y Vezo para el eje de la defensa. Además, el preparador valenciano espera recuperar pronto a Róber Pier, quien el pasado mes de mayo se rompió el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y ya ha empezado a trabajar junto al grupo.Bruno ha llegado al Levante con la carta de libertad y se ha vinculado sólo hasta junio, aunque ambas partes tienen previsto abordar su situación a finales de marzo, tal y como explica el representante del futbolista, Javier Coso. El tinerfeño aspira a reivindicarse en Orriols después de haber disputado sólo ocho partidos con el Getafe en lo que va de curso: dos encuentros de Liga, uno de Copa del Rey y cinco de Europa League. En total 644 minutos.Bruno, de 29 años, tratará de aprovechar su llegada al Levante y, a partir de ahí, no descarta nada. Aunque el junio será libre, el zaguero deja abierta la posibilidad de negociar una ampliación contractual. Todo dependerá de su rendimiento y sus sensaciones durante los próximos cuatro meses. Su intención pasa por garantizar un vínculo de dos temporadas como mínimo.El canario entró en la operación de Cabaco. El Levante traspasó al central uruguayo al Getafe por 7,85 millones de euros, de los que 5,5 han ido a parar a las arcas granotas. Y es que el 30 por ciento del montante correspondía al Nacional de Montevideo. Así, la entidad de Orriols percibe una jugosa inyección económica por un defensa por el que pagó dos millones en mayo de 2018. Además, el Levante mantiene cierto control sobre Cabaco al conservar el 15 por ciento de sus derechos económicos, mientras que el Nacional se guarda un cinco por ciento. En caso de que el Getafe lo traspase en un futuro, deberá repartir los ingresos.Al mismo tiempo, el Levante ha traspasado a Oier al Espanyol por 1,5 millones. En total, el club azulgrana se ha embolsado 7,2 kilos en el mercado invernal, ya que también ha arañado 200.000 euros por la llegada de Chema Rodríguez al Getafe. Y todo apunta a que el Nantes ejercerá la opción de compra de cinco kilos que dispone sobre Moses Simon. Así, quedarán cubiertos los 12,5 millones en venta de futbolistas que la entidad debe obtener antes del 30 de junio para cuadrar el presupuesto.
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