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El Levante disfruta de una magnífica racha de 20 partidos seguidos invicto en los últimos cinco meses, una serie de resultados que ha catapultado al equipo de Orriols del decimocuarto puesto de la clasificación a la parte alta de la tabla de la categoría de plata, donde se encuentra actualmente en deseados puestos de ascenso directo. Cuando al término de la novena jornada se prescindió de los servicios del tunecino Mehdi Nafti, nadie se esperaba que el cambio de entrenador tuviera este efecto tan positivo en el Levante.
Con el director deportivo Felipe Miñambres como técnico interino improvisado durante dos jornadas, y con Javi Calleja ya como sustituto oficial con todas las de la ley en las dieciocho siguientes, el Levante no ha conocido la derrota en los partidos de Liga desde inicios de octubre, cuando el Racing de Santander asaltó el Ciutat de València causando la destitución de Nafti.
Sólo el Atlético de Madrid —un equipo de una categoría y nivel superior— ha sido capaz de vencer al conjunto granota, aunque en otra competición que no computa para la racha, apeándole de la Copa del Rey en la ronda de octavos de final. Doce triunfos y ocho empates ligueros en un semestre mágico donde el equipo se ha transformado en una máquina de sacar adelante partidos y sumar puntos incluso en los encuentros donde más adversidades ha tenido que enfrentar.
En diez de esos compromisos, es decir, en más de la mitad, el equipo de Orriols ha dejado la portería a cero demostrando la solidez defensiva característica de los equipos entrenados por Calleja. No encajar goles, una cualidad necesaria —ya que si no te marcan, como mínimo, no pierdes— para competir con los mejores de la categoría y estar arriba, cerca de los puestos que dan acceso a la ansiada Primera División.
Por poner en contexto la gran hazaña que está consiguiendo el Levante esta temporada, la racha de 20 partidos invicto se coloca ya como la sexta mejor de la historia de la categoría de plata, igualada con la misma marca que consiguieron el Sporting de Gijón en la 2014-15 y la Unión Deportiva Salamanca en la campaña 1996-97. De ganar o empatar en el próximo compromiso de este sábado ante el Huesca en El Alcoraz, el Levante llegaría a la cifra de 21 partidos sin perder, los mismos que llegó a encadenar la Unión Deportiva Las Palmas en la 1997-98, que es el único caso de las diez mejores rachas invictas de la división que no consiguió el ascenso en dicha temporada, en la que cayó en la promoción ante el Oviedo tras quedar tercero en la tabla, cuando aún jugaban contra el antepenúltimo de Primera.
22 fueron los partidos invicto que consiguió registrar el Espanyol en la temporada 1993-94, mientras que el récord absoluto lo tiene el Real Valladolid de la 2006-07 con 29 encuentros consecutivos sin perder, una cifra que el Levante todavía podría alcanzar esta temporada, ya que le restan trece jornadas por disputar y está a tan sólo nueve partidos invicto más de igualarla, y a diez de superarla.
Todos los equipos que acumularon 20 partidos o más invicto durante una temporada de Segunda División terminaron ascendiendo, excepto el ya comentado caso de Las Palmas. Un dato que acerca más al Levante a su soñado regreso a la élite en el primer año tras el descenso. Y es que de todos los casos expuestos, únicamente Valladolid y Las Palmas realizaron dicha hazaña en un año en el que no venían de un descenso, ya que el resto de equipos consiguieron su récord ascendiendo en la temporada siguiente a la de haber bajado desde Primera, regresando a la élite por todo lo alto.
Al Levante le espera un mes fallero de enfrentamientos aparentemente favorables. El calendario sonríe y los próximos cinco rivales del equipo de Calleja son teóricamente asumibles hasta finales de marzo: Huesca fuera, Albacete en casa, Málaga fuera, Racing fuera y Zaragoza en casa. Dos partidos en el Ciutat ante rivales de la zona media de la tabla y otros tres desplazamientos contra equipos de la zona baja de Segunda División.
En cambio, con la llegada de abril, se complicará la cosa. En el cuarto mes del año el Levante se tendrá que medir a tres de sus rivales directos por el ascenso. La dura visita a Ipurúa contra el Eibar se antoja un partido clave. Recibirá luego al Mirandés en casa, antes de volver a afrontar una final con viaje a Canarias incluido para enfrentarse a Las Palmas.
Después recibirá al Alavés en el Ciutat, para volver a visitar el archipiélago y medirse al Tenerife. Para cerrar las últimas tres jornadas en mayo, jugará con el colista Ibiza en casa, derbi con el Villarreal B y último partido como local ante el Oviedo.
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Iker Cortés | Madrid
Sara I. Belled y Leticia Aróstegui
Patricia Cabezuelo | Valencia
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