Soldado y Cantero cogen impulso copero

Javier Calleja ya recordó antes del encuentro que la prioridad es el ascenso a Primera División. Sin medias tintas. Pero eso no significaba que el técnico del Levante fuera a despreciar la Copa del Rey. En absoluto especuló. El madrileño, contando con una plantilla equilibrada en diversas demarcaciones, aprovechó este sábado el fondo de armario para resolver la eliminatoria ante el Olot en un abrir y cerrar de ojos. En el minuto 35, el marcador del Nou Estadi Municipal ya reflejaba un 0-4 que se iba a convertir en definitivo. A partir de ahí, el equipo bajó una marcha y se sucedieron los cambios para dosificar los esfuerzos. El duelo, además, no pasó factura de cara al próximo compromiso de Liga, la competición en la que el técnico granota tiene puestos los cinco sentidos. Ningún futbolista regresó de tierras gerundense con problemas físicos. Y hubo dos jugadores que volvieron con una visible sonrisa de satisfacción, más allá de los debutantes Joan Femenías y Carlos Giménez. Se trata de Roberto Soldado y Alejandro Cantero, quienes marcaron la diferencia en los metros finales. Wesley Moraes, en cambio, terminó con el gesto torcido porque se le sigue resistiendo el gol.

"La Copa siempre es bonita. La tomamos con mucha seriedad. La idea es llegar lo más lejos posible teniendo en cuenta que nuestro principal objetivo es la liga. Nuestra prioridad es ascender", avisó Calleja antes del partido. Pues la primera ronda del torneo quedó solventada por la vía rápida. Bajo los palos se situó Femenías, quien apenas tuvo trabajo. Eso sí, en la única ocasión en que el Olot le puso a prueba, el arquero voló para desviar el duro disparo de Urri. En ese momento, previo al descanso, el Levante ya vencía por 0-4.

Los azulgrana tenían enfrente a un Olot que marcha penúltimo del Grupo 3 de Segunda Federación y que este sábado estrenaba entrenador. El valenciano Jonathan Risueño ha tomado el relevo del destituido Manix Mandiola. En el once del conjunto catalán, dos viejos conocidos como Jordi Xumetra y Gonzalo Pereira.

Los granotas, con el canterano Carlos Giménez en el eje de la zaga, tuvieron el partido bajo control desde el primer instante. Pero el claro protagonista de la primera parte estaba en la banda izquierda. Cantero, quien ha perdido protagonismo en Liga en los dos últimos meses, se reivindicó a base de velocidad, desequilibrio y ayudas defensivas. Participó en tres de las cuatro dianas.

Soldado también dio un golpe sobre la mesa con un doblete en los primeros 26 minutos. Desplegó su movilidad y su clase en la definición. Marc Pubill, muy participativo, se estrenó como goleador en el Levante con un cañonazo. Instantes después, Cantero cabalgó y fabricó el cuarto, en el que Aimar empujó el balón al interior de su propia portería. Wesley, en cambio, estuvo poco fino dentro del área. Aportó con su imponente juego de espaldas, pero le faltó pólvora. Después de 793 minutos disputados, todavía no ha marcado con la camiseta granota. Los de Calleja, que controlaron el choque hasta el final, conocerán el miércoles su próximo rival copero.

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