Última hornada con distinto sabor

El domingo, en el Nuevo Los Cármenes, Paco López cumplirá 76 jornadas en el banquillo del Levante. Una cifra equivalente a dos Ligas completas. El de Silla debutaba en Primera División el 10 de marzo de 2018 en un partido contra el Getafe que marcó un punto de inflexión. El valenciano se ha hecho fuerte entre las nuevas generaciones de los banquillos españoles. Uno de los últimos en llegar es, precisamente, el técnico del Granada: Diego Martínez. El vigués, quien debuta esta temporada en la máxima categoría, se alza como una de las revelaciones del fútbol nacional. Ambos entrenadores han aportado frescura y personalidad. No han tenido un camino fácil para llegar a la cima. Con un rendimiento semejante, hay sensibles diferencias en sus señas de identidad.

Analizando a los actuales inquilinos de los banquillos de Primera División, Paco López se encuentra entre los siete entrenadores que se han estrenado en la élite desde 2018. Ese año también lo hicieron Julen Lopetegui e Imanol Alguacil, mientras que Albert Celades, Óscar García, Vicente Moreno y Diego Martínez han debutado esta temporada. Savia nueva en la Liga.

Curiosamente, Paco López y Diego Martínez muestran una media de puntos por partido muy similar en la máxima categoría. El preparado del Levante luce un promedio de 1,35 en los 75 encuentros que acumula en Primera, mientras que el líder del Granada alcanza los 1,42. El entrenador vigués, quien logró el ascenso con el cuadro nazarí la pasada campaña, está causando sensación. Su equipo marcha noveno en Liga y disputa hoy la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey frente al Athletic.

Tanto Paco López como Diego Martínez han entrenado en todas las categorías desde Tercera. Se han curtido con paciencia. Hasta dar el salto a Primera. El de Silla prolongó su carrera como futbolista hasta los 35 años y, posteriormente, inició su aventura en los banquillos. El gallego dio rienda suelta a su vocación como técnico a una edad muy temprana.

Diego Martínez se erige en el entrenador más joven de Primera División. Con sólo 39 años, supera a Javier Calleja y Jagoba Arrasate, quienes tienen 41. Sergio González cuenta con 43, mientras que Gaizka Garitano y Albert Celades ya han cumplido 44. Y es que el preparador del Granada decidió muy pronto que su futuro pasaba más por los banquillos que por los terrenos de juego.

Con 18 años, Diego Martínez se percató de que su proyección como futbolista resultaba insuficiente. Cuando era sólo un niño, ya había despertado dentro de él el interés por los aspectos tácticos y metodológicos. Le apasionaba el análisis del juego. De esta forma, a sus 20 primaveras, comenzó su trayectoria como técnico dirigiendo el cadete B del Imperio. Ahí descubrió definitivamente su vocación.

En 2009, el cazatalentos Monchi incorporó a Diego Martínez a la estructura deportiva del Sevilla. Concretamente, al área de metodología. Posteriormente, tomó las riendas de equipos de las categorías inferiores del club hispalense. Hasta que le llegó la oportunidad de formar parte de cuerpos técnicos del primer equipo. Especialmente le marcó su etapa como ayudante de Unai Emery. De la mano del guipuzcoano, creció profesionalmente.

Tras entrenar al Sevilla Atlético y pasar una temporada en Osasuna, Diego Martínez aterrizó en el Granada en 2018. Desde entonces, sólo ha saboreado éxitos. El vigués ha puesto su sello al conjunto nazarí, que está siendo la gran sorpresa de la temporada en Primera División. Incluso llegó a colocarse como líder de la clasificación a finales de octubre.

Las filosofía de Diego Martínez se basa en la intensidad y la solidaridad. El preparador vigués trata de formar un conjunto correoso, con una defensa consistente y un ataque rápido a través de hombres como Roberto Soldado y Darwin Machís. En el Levante de Paco López también trata de explotar el juego directo, aunque con otro estilo. El de Silla, de 52 años, apuesta por un fútbol valiente y abierto, aunque la zaga sufre en varias ocasiones.