El nuevo precio del aceite de oliva virgen extra en los supermercados desde este lunes 10 de marzo
Una máquina segadora trabajando en los arrozales del marjal de Pego. B. Ortolà

Arroceros de Pego estiman una caída de la cosecha del 30% por la resistencia de malas hierbas

Los productores confían en que los principales compradores lo consuman de forma masiva para que se recuperen los precios

R. M. A.

Pego

Lunes, 4 de octubre 2021, 22:56

La campaña del arroz en el parque natural del marjal Pego-Oliva no ha ido todo lo bien que se esperaba. Hace pocas semanas finalizó la siega de la variedad bomba, la principal que se cultiva en esa zona, y la sectorial del Arroz de Jóvenes Agricultores Asaja Alicante estima que se ha saldado con una merma de producción de entre un 25% y un 30%, por lo que se alcanzarán un total de un millón de kilos. Un descenso que se produce debido a la resistencia que se está produciendo en las malas hierbas que crecen alrededor del cultivo por la utilización repetida de los pocos productos de herbicidas autorizados por la UE.

Publicidad

"En esta campaña especialmente, nos estamos encontrando con una adaptación de las malas hierbas, motivado porque el número de productos fitosanitarios autorizados para tratamientos es menor, son más caros y menos efectivos", afirma Pep Orihuel, productor de arroz y presidente de la sectorial de Arroz de Asaja. Según explica, esto "provoca resistencias que conllevan menor efectividad, haciendo que coexistan arroz y hierbas, con el resultado directo de un menor desarrollo del arroz, más grados de humedad e impurezas cuando se siega el cereal".

Orihuel lamenta que "las directrices europeas son para toda la UE, pero en casi todos los países europeos productores de arroz son más permisivos con otros productos que aquí en España y, en concreto la Comunitat, no nos dejan emplear".

Por otro lado, los productores confían en que este año los principales compradores y destinatarios de este producto, la hostelería de la provincia, lo consuman de forma masiva. Eso propiciaría una recuperación de los precios en origen anteriores a la pandemia, cuando el kilo en campo cotizaba de 0,80 euros en adelante y había rentabilidad.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€

Publicidad