R. M. A.
Calp
Lunes, 27 de septiembre 2021, 14:11
El Ayuntamiento de Calp decidió a principios de septiembre intensificar la vigilancia medioambiental para erradicar los vertidos ilegales de poda, enseres y escombros que se están produciendo en el municipio. Una labor que desarrollan de forma coordinada la Policía Local y Acciona, la empresa adjudicataria del servicio de limpieza y gestión de residuos. En menos de un mes los agentes ya han puesto cuatro denuncias con sanción por verter restos de poda a la vía pública, incumpliendo la ordenanza de limpieza viaria.
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La decisión de intensificar este tipo de vigilancia se adoptó tras detectar este verano un incremento en los vertidos ilegales, especialmente de poda, en las urbanizaciones. Además de intensificar el control del término municipal, el consistorio está estudiando modificar la Ordenanza de Limpieza Viaria y Residuos Sólidos Urbanos para regular como infracción grave estos vertidos, lo que llevará aparejado un endurecimiento de las sanciones.
Desde el Ayuntamiento se ha informado a los ciudadanos que los particulares pueden llevar los restos de poda al Punt Blanc, siempre que no supere 1,5 metros cúbicos o 30 kilos atados en haces no superiores a metro de longitud. También pueden depositarlos junto a los contenedores o en la línea de fachada, siempre que no supere las anteriores especificaciones, y en horario de 6.30 a 13.30 horas.
Si se trata de restos de poda de empresas o si los restos son superiores a 30 kilos, el propietario está obligado a su retirada y transporte a la instalación debidamente autorizada.
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