La Siesta, una urbanización de pesadilla en Dénia

Aquellos que viven en las inmediaciones critican la degradación que sufre esa construcción, que ha ido creciendo en los últimos años. La presidenta de la asociación Veïns del Montgó, Christine Huc, recalca que «aquello se ha convertido en un polvorín».

Según dice, no tienen nada en contra de las personas que han ocupado las casas porque tienen derecho a buscarse la vida. Explica que el problema radica en la madera y muebles que dejan y también en que bloquean la entrada, con el peligro que eso supone en caso de incendio. Y no sólo eso, sino que también tienen «bombonas de camping gas que pueden explotar y hay vallas y basura por el suelo, se ha convertido en un territorio sin control», lamenta.

De hecho, hace un mes se produjo un fuego en una de las viviendas de la urbanización que desató la alarma entre los vecinos.

Pero esa no es la única queja de los que viven cerca. También ha habido peleas y durante el verano han soportado fiestas hasta altas horas de la madrugada. Tal es el malestar que algunas personas de vecindario han intentado vender sus viviendas para irse porque no aguantan más allí.

Ante esta situación, la presidenta de Veïns del Montgó ha solicitado al Ayuntamiento de Dénia que tome cartas en el asunto. Según cuenta, les han respondido que es difícil porque deben ser los propietarios los que den el paso. Y «en este caso debería ser el banco o fondos buitre».

En ese sentido, el concejal de Protección Ciudadana, Javier Scotto, reconoce que no tienen competencia. Insiste en que, mientras no haya una resolución judicial, no podrán actuar.

Lo que sí se ha producido es un incremento de la presencia de Policía Nacional y Local en la zona. Los agentes han identificado a los okupas para comprobar si tienen causas pendientes, apunta el edil. Aspecto que también corrobora el inspector jefe de la Policía Nacional de Dénia, Carlos Nieto. Según indica, se llevan a cabo controles preventivos y patrullan por la zona de manera coordinada con el cuerpo de seguridad municipal.

La Siesta de Dénia es una urbanización rodeada de polémica desde que empezó a construirse en 2002 y cuyas obras estuvieron siete años paralizadas. Hoy en día presenta una imagen deteriorada, con ventanas sin cristales y algún balcón tabicado.