Altea mejorará su red de pluviales en una obra que generará días complicados para el tráfico rodado

Se presentan unos días complicados para el tráfico rodado en Altea. El Consistorio ha anunciado para este martes, 15 de febrero, el inicio de unas obras de mejora en la red de pluviales que obligarán a actuar en el subsuelo del carrer La Mar, nombre que recibe la N-332 a su paso por la Villa Blanca y que, como ya explicó el edil de Infraestructuras y Obras en una reciente entrevista concedida a LAS PROVINCIAS, sigue siendo la única alternativa posible para cruzar el municipio si no se utiliza la AP-7.

La principal problemática que suponen estas obras radica en la imposibilidad de cortar el tráfico por completo en la mencionada carretera, por lo que los trabajos se prolongarán durante tres días en los que, siempre en horario vespertino, se cortará uno de sus carriles. Para evitar estas molestias, el Ayuntamiento barajó la opción de realizar las obras durante la noche, pero finalmente desistió de ello por las molestias que estas generarían en el descanso de los vecinos de la zona.

Tal y como explica Zaragozí, la obra supone «una doble intervención». La primera de ellas consistirá en la modificación de «las infraestructuras de pluviales que bajan del pueblo antiguo». Se trata de unas conducciones «que originalmente pasan por debajo de las edificaciones para desembocar en el mar. Este hecho, ha provocado que en épocas de lluvia se produzcan inundaciones en las casas. Aprovechando las obras del frente litoral se van a pasar estas conducciones por un callejón cercano y así se evitará que se vuelva a afectar a las casas en episodios de lluvia intensa».

Además, la reciente cesión al Consistorio de la carretera N-332 a su paso por Altea va a permitir que el Ayuntamiento acometa una actuación que en el pasado nunca recibió el visto bueno del Ministerio de Fomento, anterior titular de la vía.

Se trata de una obra especialmente necesaria, como en el caso anterior, en época de lluvias y afecta a la parte de la carretera más cercana a la vía del tren, donde tradicionalmente «se forman grandes charcos debido a que el tubo del conducto que pasa por debajo de la carretera se tapona», un tubo que ahora será sustituido por uno de mayor calibre.

El corte de un carril del carrer la Mar, a la altura de los números 19 y 28, se iniciará el martes, 15 de febrero y concluirá el jueves; siempre en horario de 15:00 a 24:00 horas.

Zaragozí explica que «esta es una zona con mucho tráfico y por ello hemos intentando evitar hacer las actuaciones por la mañana y tampoco por la noche para no molestar a los vecinos. Por ello, hemos determinado que en este horario se ocasionarán las menores molestias, aunque somos conscientes de ellas y por ello pedimos disculpas a los afectados. Será una obra corta pero muy necesaria, en sólo tres días podremos solucionar dos importantes problemas endémicos que tenía Altea».

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